Economía
Consumo

España es el país europeo con mayor peso de marca blanca en supermercados: el 44% de las ventas

  • Nayara Mateo
  • Redactora de economía, especializada en el sector inmobiliario, turismo, consumo y distribución. Antes en Expansión, Efe y Brainsre.news.

Las marcas blancas han ido ganando adeptos en los últimos años. En siete mercados europeos ya representan el 35% de las ventas en valor total, lo que supone cerca de 194.000 millones de euros. En concreto, España es el país donde mayor peso tienen, puesto que alcanzan el 44% de las ventas totales de los supermercados. Por detrás, se sitúa Alemania, donde representan el 38% del volumen.

No obstante, en términos de valor absoluto, Alemania y Reino Unido lideran las ventas de este tipo de productos, con un volumen de 60.000 y 43.000  millones de euros, respectivamente, según un estudio de la compañía de análisis de mercado IRI.

Entre 2017 y 2019, la venta de productos de marca blanca crecieron a doble dígito, pero disminuyeron un 1,4% durante la pandemia. «Los consumidores eligieron sus marcas de confianza, marcas de fabricante en mayor medida. Sin embargo, es probable que esta tendencia se atenúe y se revierta a medida que las marcas de fabricante aumenten los precios debido a la inflación», explican desde la firma.

Actualmente, la recuperación la lideran los productos de no alimentación  como las categorías de cuidado personal. No obstante, en las últimas 12 semanas la alimentación seca y las bebidas han comenzado a mejorar junto con la confitería.

Guerra de precios

En la segunda mitad del año se verán guerras de precios. Se prevé que los fabricantes pequeños y medianos pierdan consumidores, volumen y valor frente a los grandes fabricantes y las marcas blancas de quienes «se espera que mitiguen la inflación y mantengan la disponibilidad del producto en los lineales, a pesar de la escasez de ingredientes y las dificultades en la distribución», comenta IRI.

Aquellos que eligen marca blanca y de fabricante indistintamente representan el 50% de los consumidores encuestados por la compañía. Se trata principalmente de hogares de renta media (en España, Francia, Alemania e Italia) y de renta alta también en Alemania y Francia.

Últimamente, las marcas blancas y de fabricante han reducido su diferencia en cuanto a la percepción que tiene el consumidor sobre innovación, calidad, confianza y sostenibilidad. En este sentido, un gran impulsor de ello ha sido el valor añadido y la calidad, así como la experiencia de compra que ofrece el retailer.

Menos gasto en dulces

A pesar del escenario que dibuja la inflación, los consumidores declaran que gastarán más en alimentos de origen vegetal, alimentos y bebidas funcionales, vitaminas, suplementos y productos de la panadería. Pero invertirán menos en chocolates y dulces estacionales (como los polvorones), fragancias y alimentación seca (como las salsas).

Para concluir, Ananda Roy, vicepresidente internacional de insights estratégicos en IRI, asegura: “La perspectiva en 2022 y 2023 es positiva, ya que es probable que vuelva al crecimiento a medida que los precios de las marcas de fabricante se incrementan”.