Economía
La falta de un acuerdo comercial puede golpear directamente al sector alimentario y el turismo

La empresas españolas diseñan un plan anti ‘Brexit’ y buscan nuevos mercados fuera de Reino Unido

No ha pasado ni una semana desde que Bruselas y Londres alcanzaron un acuerdo para pasar a la siguiente fase de negociaciones del Brexit. La incertidumbre tiene alerta a los empresarios y las compañías españolas observan cómo evolucionan las negociaciones. Sin embargo, no se han quedado de brazos cruzados y algunas ya se han puesto en marcha para mover sus operaciones fuera del Reino Unido. La incertidumbre «ha tenido un gran impacto en las inversiones, algunas decisiones clave se han pospuesto. Algunas compañías de transporte y finanzas ya tienen planes de contingencia activados y están moviendo operaciones fuera del Reino Unido”, son algunas de las conclusiones que se desprenden del último informe de la Cámara de Comercio Británica de España.

Aunque las compañías españolas sostienen que el Brexit no sólo ha tenido un impacto negativo: la depreciación de la libra esterlina ha tenido un “impacto positivo” en algunos casos por “los ajustes internos”. Pero, este efecto es temporal y no va a paliar las consecuencias que generará la incertidumbre ante los futuros acuerdos. El divorcio entre la Unión Europea y Reino Unido tiene fecha (el 29 de marzo de 2019 ya no formará parte del club europeo), el tiempo corre y los empresarios españoles con presencia en Reino Unido no saben cómo va a culminar la negociación.

«La gente no va a invertir en Reino Unido porque no pueden utilizarle como país para acceder a otras naciones de la Unión Europea (UE). No saben lo que van a tener, los inversores no saben qué condiciones tendrán y la incertidumbre no va a despejarse en años. El periodo de transición va a ser largo: tienen que ratificarlo 27 países, que entre en vigor y que se ponga en marcha. Hay mucha incertidumbre, la misma que había antes porque no se ha avanzado» en el acuerdo, explica Ruben García-Quismondo, empresario experto en el Brexit.

No sólo puede provocar un parón en la inversión: también puede frenar la creación de empresas. «Instalarte en el Reino Unido para acceder a otros mercados no es racional», apunta García-Quismondo.

Las compañías españolas están alerta ante la previsible factura del divorcio entre la UE y Reino Unido. Las empresas de la Cámara de Comercio Británica reclaman a los diferentes gobiernos que avancen de forma urgente en las negociaciones y que proporcionen más información para poder mover ficha sobre un tablero que aún se tambalea. «Theresa May se está dando cuenta de que lo que se pide no es factible.

 

Expansión de negocio

En la otra cara de la moneda está el “partido” que le pueden sacar los empresarios españoles al Brexit. “Las empresas sienten que deben buscar nuevos mercados o mejorar su presencia en los existentes, algunas para compensar los posibles efectos del Brexit”. Esto, desde la Cámara de Comercio Británica, señalan que es una oportunidad para muchas empresas, sobre todo del sector servicios.

Los expertos y la Cámara coinciden en que la incertidumbre provoca volatilidad y todos los agentes económicos están pendientes sobre cómo cambiarán las reglas del juego. La futura regulación podría ser un «desastre».

El acuerdo comercial, la clave

«Nos puede perjudicar a las compañías españolas si no llegamos a un acuerdo comercial: puede haber aranceles, distinta normativa de la UE, límite en la circulación de personas y de productos… Puede tener efectos muy negativos. Ambos pierden», indica García-Quismondo.

Si hay falta de acuerdo entre ambos países, hay dos sectores que se pueden ver especialmente perjudicados: el alimentario y el turismo. La disponibilidad de los productos y el abastecimiento de Reino Unido podría verse perjudicado, así como los aranceles podrían provocar un incremento de los precios tanto en los alimentos, como en la oferta turística, según apuntan los expertos.

 

La seguridad jurídica en España “es necesaria” para mantener la inversión

En el informe de la Cámara de Comercio también señalan la seguridad jurídica dentro de España, así como un marco laboral y financiero estable, como algo «necesario» para que las empresas mantengan sus inversiones y empleos.

La situación política también se cuela entre las preocupaciones para que nuestro país entre en la liga de las naciones que acojan las compañías que se marchen de Reino Unido. Por ello, piden a los Gobiernos que se esfuercen en que sea una transición suave.