Economía
Inflación en el 9,6% en diciembre

Los economistas son más optimistas que el BCE y ven al IPC de la eurozona en el 2% a inicios de 2024

Los economistas estiman que el IPC de la eurozona llegará al 2% en el primer trimestre de 2024 y alcanzará así el objetivo del Banco Central Europeo (BCE), aunque el organismo se muestra menos positivo y cree que los precios cerrarán dicho año en el 2,3%.

El mayor panel de economistas del mundo, que compila la agencia Bloomberg, se muestra así más optimista que el BCE a medio plazo, pero es más pesimista para este año. El panel muestra que la inflación cerrará este año en el 9,6%, mientras que el banco central cree que concluirá en el 8,1% y eso que revisó al alza sus previsiones.

El BCE preveía en julio que el IPC de la zona del euro concluiría en 6,8% y tras la reunión del Consejo de Gobierno de septiembre, en la que anunció la mayor subida de tipos de su historia -0,75 puntos hasta el 1,25%-, empeoró las perspectivas. El nuevo escenario pasa por una inflación del 5,5% en 2023, frente al 3,5% previo, y del 2,3% en 2024, desde el 2% anterior.

La normalización de la política monetaria del BCE tardará más de un año en secar el IPC, según informó OKDIARIO conforme a fuentes del organismo con sede en Fráncfort. El objetivo ahora es “alterar las pautas de conducta tanto de las empresas como de los consumidores, afectando a sus expectativas, que son claves para evitar los llamados ‘efectos de segunda ronda’. Básicamente que los salarios acaben aumentando de manera inoportuna desatando una espiral alcista de los precios”, señalaron las fuentes consultadas.

Los economistas apuntan a un gran descenso de la inflación hasta caer por debajo del 3% en diciembre de 2023. La responsable de la caída será la recesión pues el 80% de los economistas del panel auguran una contracción sostenida de la economía a lo largo del año que viene, mientras que el BCE no trabaja con un marco recesivo como escenario central.

El organismo presidido por Christine Lagarde evita usar la palabra recesión. Ha revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento para los dos próximos, confirmando así la estanflación, pero ha mejorado su estimación para este año. En cambio, hay grandes firmas de inversión que creen que Europa entrará en recesión técnica, dos trimestres consecutivos de contracción económica, entre finales de este año y principios del que viene. Las cifras de actividad de la industria y el sector servicios ya descuentan la recesión.

Los expertos del BCE creen ahora que la economía terminará este año con un crecimiento del 3,1%, superior al 2,8% de la previsión anterior. El empeoramiento se produciría a partir de 2023, año en que la economía crecería el 0,9%, desde el 2,1% anterior, y en 2024, cuando se incrementaría el 1,9%, frente al 2,1% calculado en julio.

El BCE asegura que la economía apunta a una “desaceleración sustancial” y que espera un “estancamiento” por los “elevados” precios de la energía que están “reduciendo” el poder adquisitivo con una guerra que afecta “a la confianza de las empresas y los consumidores”. El banco central espera que a medida que los actuales determinantes de la inflación “vayan desapareciendo con el tiempo” y que la normalización monetaria “se transmita a la economía y la fijación de precios”, la inflación descenderá.