Economía
Fiscalidad

Los economistas descartan que el impuesto a las fortunas logre recaudar 1.500 millones en ningún año

Con los datos del antiguo Impuesto de Patrimonio no hay suficientes declarantes para llegar a esa cifra en el de grandes fortunas

El Impuesto a las grandes fortunas recauda 623 millones: el 89% procedente de Madrid

Los economistas piden suprimir el impuesto a las grandes fortunas por expulsar la riqueza de España

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

El Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas sólo ha recaudado este año 623 millones, menos de la mitad de los 1.500 previstos por el Gobierno. El Consejo General de Economistas considera «impensable» que se pueda llegar a recaudar una cifra cercana a esa estimación en ningún ejercicio sobre la base de las cifras de que dispone procedentes del Impuesto del Patrimonio. Es decir, que las previsiones de la ministra María Jesús Montero son pura ficción.

Así lo asegura Luis del Amo, secretario técnico del REAF (el órgano del Consejo General de Economistas especializado en impuestos). Los últimos datos disponibles del Impuesto de Patrimonio, referidos a 2021, arrojan un número de declarantes de 231.367, que pagaron en conjunto 1.352 millones.

Hay que tener en cuenta, además, dos elementos: por un lado, Patrimonio se pagaba a partir de una riqueza de 300.000 euros, mientras que el impuesto a las grandes fortunas sitúa el mínimo en 3,7 millones (sumando el mínimo exento de 700.000 euros); y por otro, los contribuyentes que siguen pagando Patrimonio porque no está bonificado en su comunidad autónoma se lo deducen del de grandes fortunas, lo que minora la recaudación de este último.

«Si solo se recauda el impuesto a las grandes fortunas por lo que no se paga de Patrimonio, no salen los números por ningún lado, porque sólo se recogería la recaudación de Andalucía, Madrid y parte de Galicia. Y ni siquiera de esos contribuyentes, porque los patrimonios de menos de 3.700.000 euros tampoco pagarían el impuesto de grandes fortunas en esas comunidades autónomas», explica este experto.

Aunque los tipos de estos impuestos tampoco son iguales, la consecuencia es que absolutamente imposible que el Gobierno alcance la recaudación de 1.500 millones anunciada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

Tras el bajonazo de esa recaudación de menos de la mitad de lo previsto, Moncloa ha hecho una pirueta retórica para tratar de mantener que se han cumplido sus estimaciones: «Estas cifras son consecuentes con las previsiones del Gobierno que apuntaron que el potencial recaudatorio del impuesto de grandes fortunas alcanzaba los 1.500 millones, bajo el supuesto de que todas las Comunidades Autónomas aplicaran una bonificación del 100% en el Impuesto sobre el Patrimonio». Un supuesto que nunca se había contemplado, puesto que sólo las tres regiones citadas tenían bonificado Patrimonio.

Tasas Google y Tobin

No es ni mucho menos el primer tributo con el que el Gobierno de Pedro Sánchez patina en sus previsiones de recaudación. Ya le ocurrió con la tasa Google a determinados servicios digitales, o con la tasa Tobin a las operaciones bursátiles, que han recaudado menos de la mitad de lo anunciado desde que están en vigor.

Yolanda Díaz, vicepresidenta y ministra de Trabajo en funciones.

A pesar del fiasco del impuesto a las grandes fortunas, la vicepresidenta Yolanda Díaz ha pedido que pase a ser permanente con el manido argumento de que deben pagar más los que más tienen, a pesar de que la progresividad del IRPF ya consigue ese efecto, y que los más ricos también tributan más por IVA puesto que consumen más.

Los que sí saben de fiscalidad, el Consejo General de Economistas, pidió ayer la supresión de este tributo porque expulsa riqueza de España y no atrae altos patrimonios extranjeros a nuestro país para que inviertan y generen empleo.