El CEO de la alemana EON critica a la ministra Ribera por lanzar bulos sobre el mercado energético

El presidente de la patronal eléctrica Eurelectric, Leon Birnbaum, actual Ceo de la alemana EON, ha publicado un vídeo en sus redes sociales en el que critica a la ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y señala que su afirmación de que el mercado energético está roto es una ‘fake news’. Ante tal descalificación por parte de una de las vicepresidentas del Gobierno de Sánchez,  Leo Birnbaum responde: «Es falso porque el mercado no está roto. En realidad, el mercado europeo fue absolutamente fundamental para que superáramos el último año». Lo que necesitamos, indica, es una reforma que haga modificaciones específicas a este mercado para hacerlo aún más resistente en el futuro.

El máximo responsable de las empresas europeas del sector responde así, de manera indirecta, al mantra fundamental de Ribera, que desea por todos los medios acabar con el mercado marginalista, en el cual los precios se fijan en función de la oferta y la demanda -y con el que están de acuerdo la mayoría de los gobiernos europeos- para sustituirlo por un modelo intervenido y un regulador único que establezca los precios sin control alguno y al margen del mercado. Estas críticas se suceden después de varios informes críticos con la propuesta de Ribera, tanto de la consultora PwC como de EY, según los cuales los postulados del Gobierno español podrían eliminar la libre competencia, ir en contra de las reglas básicas del mercado y daría lugar a un sector más intervenido con grave perjuicio para los consumidores y para los generadores de energía.

En sentido contrario a los postulados del Ejecutivo español, la patronal europea Eurelectric ha publicado un extenso estudio sobre su visión de diseño del mercado de electricidad de la Unión Europea de cara a un futuro de emisiones netas cero en el que destacan reformas rupturistas, aunque partiendo de la estructura existente, «que ha demostrado su eficacia a lo largo de las dos últimas décadas». Los empresarios europeos piden trabajar sobres tres pilares básicos: empoderar a los consumidores, incentivar las inversiones en energías limpias y garantizar el suministro.

El objetivo del informe es que «los consumidores limiten su exposición a la volatilidad de precios más extrema, para que los inversores se beneficien de una mayor certidumbre y visibilidad a largo plazo y para que las autoridades públicas puedan fundamentar sus decisiones sobre cómo dirigir el desarrollo del sistema energético», afirma el señor Birnbaum. Eurelectric demuestra cómo un diseño revisado del mercado podría beneficiar a los clientes estableciendo un nuevo equilibrio entre las señales de precios a largo y a corto plazo. Las herramientas: un mayor uso de instrumentos a largo plazo -acuerdos de compra de energía (PPA) y contratos por diferencia (CfD) – combinado con una mayor liquidez en los mercados a plazo.

El estudio destaca la importancia de contar con proveedores financieramente sólidos, pero también subraya la eficiencia económica de un planteamiento basado en el mercado -contrariamente a lo que plantea la ministra Ribera y el propio presidente Sánchez, que quiere intervenir los precios. En su análisis considera que en lugar de obligaciones de cobertura impuestas políticamente, un marco flexible de resistencia aplicado por los estados miembros debería contribuir a garantizar la solidez de los proveedores. El dosier destaca también que la flexibilización de la normativa sobre garantías y la mejora de las oportunidades de cobertura transfronteriza pueden desarrollar aún más los mercados a plazo y estimular la liquidez, haciendo así que la cobertura sea más manejable, en beneficio de los clientes.

Sobre el entorno inversor que asegure la transición energética y la eficiencia del sistema, Euroelectric señala que los instrumentos a largo plazo son fundamentales para las inversiones intensivas en capital en tecnologías renovables y de baja emisión de carbono, ya que proporcionan estabilidad de precios y visibilidad a largo plazo de los rendimientos. La reducción del riesgo de estos contratos podría contribuir a reforzar los enormes ritmos de inversión necesarios para cumplir los objetivos de 2030, que deben rondar los 80.000 millones de euros anuales para alcanzar los objetivos políticos. Eso sí, asegura que para garantizar la proliferación de instrumentos a largo plazo es imprescindible eliminar las barreras legislativas que dificultan su uso.

Las autoridades públicas pueden desempeñar un papel complementario cuando las señales de inversión no proceden del mercado. Según la patronal, las CfD respaldadas por el Estado, por ejemplo, se utilizan a menudo con éxito para proyectos renovables a gran escala. Sin embargo, no deben aplicarse con carácter retroactivo y su uso debe seguir siendo voluntario para evitar obstaculizar los proyectos a pequeña escala y coartar la iniciativa privada. El estudio también señala la necesidad crítica de garantizar un equilibrio entre los distintos instrumentos a largo plazo. Asimismo, plantea opciones técnicas innovadoras para los mecanismos de calibración y el diseño de los CfD.

El tercer elemento troncal de la reforma según la patronal es garantizar que la adaptación del mercado eléctrico permita anticipar y coordinar mejor las necesidades del sistema para garantizar la seguridad del suministro. En su opinión, a medida que el sistema energético cambia con el aumento de la electrificación y la generación descentralizada, se necesita una visión más granular de la dinámica cambiante, especialmente en las redes de media y baja tensión. Esto puede ayudar a fundamentar las decisiones sobre el refuerzo de la red y el aumento de la capacidad flexible y firme.