Economía

La Agencia Europea del Medicamento alerta sobre los peligros de los complementos alimenticios que incluyen Omega-3

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha emitido una alerta sobre los posibles riesgos de estos productos

Más de la mitad de los españoles consume menos ácidos grasos Omega-3 de los recomendados

Los complementos alimenticios que contienen ácidos grasos omega-3 son muy populares entre los consumidores que buscan mejorar su salud cardiovascular, reducir el colesterol, prevenir la inflamación o favorecer el desarrollo del cerebro y la visión. Sin embargo, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha emitido una alerta sobre los posibles riesgos de estos productos, especialmente cuando se consumen en dosis altas o junto con otros medicamentos.

La EMA alerta sobre lo complementos alimenticios Omega-3

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha alertado sobre un potencial efecto adverso de los medicamentos a base de omega-3: la fibrilación auricular, una forma común de arritmia cardiaca. Dada la relevancia de estos ácidos grasos y su presencia en numerosos suplementos alimenticios, surge la interrogante acerca de si estos también podrían desencadenar dicho efecto adverso.

Recordemos, que los ácidos grasos omega-3 constituyen una categoría de grasas saludables presentes de manera natural en diversos alimentos, especialmente en pescados grasos como el salmón, las sardinas y los arenques. Estos ácidos desempeñan un papel esencial en el funcionamiento normal del organismo y contribuyen a reducir los niveles de triglicéridos en la sangre. Asimismo, existen medicamentos autorizados para tratar la hipertrigliceridemia basados en ácidos grasos omega-3.

Medicamentos a base de omega-3 en España

Tal y como explica la OCU, en España se comercializan cuatro medicamentos para tratar la hipertrigliceridemia que contienen ácidos omega-3: Ácidos omega 3 Kern Pharma 1.000 mg cápsulas blandas, Ácidos omega 3 Strides 1.000 mg cápsulas blandas, Ácidos omega 3 Teva 1.000 mg cápsulas blandas y Omacor 1.000 mg cápsulas blandas. Todos estos productos requieren prescripción médica y contienen una combinación de ácido eicosapentanóico (EPA) y ácido docosahexanóico (DHA).

Por otro lado, estos medicamentos pueden tener  diversos efectos adversos, según se detalla en el prospecto de cada uno de ellos. Algunos de estos son poco frecuentes, como gastroenteritis, mareos, alteraciones del gusto y reacciones alérgicas, mientras que otros, como indigestión y náuseas, son más comunes.

Fibrilación auricular: un nuevo efecto adverso confirmado

La EMA ha confirmado que en personas con enfermedades cardiovasculares o factores de riesgo cardiovascular, como obesidad, tabaquismo, hipertensión o diabetes, los medicamentos a base de omega-3 aumentan la probabilidad de sufrir fibrilación auricular. Además, este riesgo es mayor con dosis más altas, especialmente con la dosis máxima de 4 gramos al día. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) indica que este efecto adverso es frecuente, afectando a entre el 1 y el 10% de los pacientes que consumen estos medicamentos.

La fibrilación auricular, es una forma de arritmia en las cavidades superiores del corazón, puede hacer que el corazón lata de manera caótica y rápida. Aunque no es letal en sí misma, sus consecuencias pueden ser graves, ya que la sangre que no fluye correctamente puede coagularse y formar trombos, que pueden desplazarse a otras partes del cuerpo, como el cerebro o los pulmones, provocando ictus cerebrales o embolias pulmonares.

Las personas que toman medicamentos a base de omega-3, especialmente a la dosis máxima, y experimentan síntomas como palpitaciones, fatiga, falta de aire o mareos, deben consultar a su médico. En caso de confirmarse la fibrilación auricular, el médico interrumpirá el tratamiento de manera definitiva.

Complementos alimenticios con omega-3: ¿un riesgo similar?

Aunque la advertencia de la EMA se refiere a medicamentos bajo prescripción médica, la preocupación se extiende a los complementos alimenticios con omega-3, que se comercializan sin restricciones regulatorias. Aunque los ácidos grasos en estos suplementos suelen ser similares a los de los medicamentos, suelen estar presentes en menor cantidad y con dosis diarias recomendadas más bajas.

Ante la falta de información clara sobre el riesgo de fibrilación auricular relacionado con los complementos alimenticios de omega-3, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha expresado su inquietud y la ha trasladado a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, quien a su vez lo ha comunicado a la Comisión Europea. Mientras se espera por más datos, se recomienda a aquellos que consuman estos complementos y tengan problemas cardiovasculares o factores de riesgo que lo comuniquen a sus médicos para una evaluación adecuada de riesgos y beneficios.