Economía
será indefinida y comenzará el lunes

El abastecimiento de alimentos frescos, ropa y coches, el mayor peligro de la huelga de transportes

Los transportistas asociados en la Plataforma Nacional en Defensa del Sector del Transporte han decidido convocar un nuevo paro indefinido desde la medianoche del domingo al lunes para protestar por las condiciones en las que trabajan miles de camioneros. Una paralización de su actividad que afectará de lleno al sector alimentario, textil y automovilístico -ya afectados por el impacto de la crisis económica- y que se traducirá directamente en una falta de abastecimiento de productos frescos, ropa y coches, como ya sucedió en el mes de marzo.

Así lo han confirmado fuentes afectadas en conversaciones con este diario, que han señalado que se preparan para hacer frente a escenarios similares a los vividos hace tan sólo unos meses, cuando los camioneros sembraron el caos logístico durante algo más de 20 días.

En este sentido, el sector agrario y el comercio temen un nuevo escenario de desabastecimiento como el vivido el pasado mes de marzo. Los supermercados ya han comenzado a hacer acopio de algunos productos como leche, pasta, arroz, conservas y aceites. Sin embargo, no pueden hacer lo mismo con los productos frescos, puesto que no aguantan muchos días en las cámaras frigoríficas.

Asimismo, hay «máxima preocupación de los bares y restaurantes ante el anuncio de un nuevo paro de los transportistas en una época clave para el sector, con el puente de diciembre y la campaña de Navidad a la vuelta de la esquina -fechas en los que los establecimientos triplican su facturación-, y que, además, llega en un contexto de subida de precios por el aumento de los costes de la energía y de los productos frescos», explican desde Hostelería España a OKDIARIO.

Preocupación en el sector del automóvil

Por su parte, el sector de la automoción también prevé que el paro de los transportistas les afecte de forma negativa tanto al suministro de materiales a las factorías para la producción de vehículos como en la entrega de las unidades en los concesionarios.

«Los fabricantes tienen cerrados contratos con las grandes empresas de transporte y no trabajo con autónomos, el miedo está en que suceda lo mismo que ya pasó en marzo cuando los transportistas asociados en la Plataforma Nacional en Defensa del Sector del Transporte impidieron trabajar al resto del sector y de ahí el desabastecimiento en las fábricas», explican fuentes cercanas al sector.

En pleno Black Friday

Además del sector alimentario y el sector automovilístico, el textil también teme un impacto negativo de la huelga de los transportistas en su negocio hasta provocar el desabastecimiento de ropa en las tiendas y retrasos en los envíos de paquetes a los clientes. Una situación que llega a tan sólo unas semanas del Black Friday y que amenaza con reducir la facturación de las empresas en este día tan importante por falta de productos en las tiendas.