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Copa Davis 2024

Sinner dobla esfuerzos y mete a Italia en semifinales de la Copa Davis

Jannik se impone en individuales e impulsa a Berrettini en el dobles

A Hewitt le sale la estrategia: Australia avanza a semifinales de la Davis tras tumbar a Estados Unidos

Argentina siempre compite. No importa la disciplina. Lo llevan en su ADN. Pero esta Italia, es mucha Italia. Lo llevan en la raqueta. Sinner dobló esfuerzos para dejar en vano el loable triunfo de Cerúndolo (6-4, 6-1) sobre un Musetti laborioso en el inicio, pero entregado en la segunda y definitiva manga del partido.

Se lo llevó Argentina, cuya ilusión brotaba en ese momento. Razones había. Visto el sólido triunfo de Cerúndolo, los dobles cogían mayor notoriedad si cabía, ya que se daba por descontado que el segundo partido caería del lado italiano. Argentina sólo necesitaba ganar uno de sus dos partidos para acceder a semifinales.

Aunque Jannik Sinner actuó de bombero Jannik Sinner y sofocó el incendio de dos manguerazos. Uno en individual y otro en dobles junto a un Berrettini reencontrado con una notable versión de su tenis. Las lesiones le han sacudido en las últimas temporadas hasta el punto de truncar su salud.

Arribó en las Finales a 8 a la segunda, pues no estaba en la primera convocatoria. Aunque sobre la pista poco importa. Servir, restar, iguales, juego, set, punto de partido… La constante toma de decisiones en cuestión de segundos espanta cualquier tentativa de desconexión. Completa el trazado Jannik con su lectura precisa de cada punto.

Sinner no da opción

Jannik sigue mostando su cara más despiadada. El italiano es un torbellino tenístico que arrasa a sus rivales por mucho que lo intenten, como ha experimentado Baez en primera persona (6-2, 6-1). El argentino, pese al dramático final de temporada con derrotas en primera ronda de los pocos torneos que ha competido, se mostró voluntarioso sobre la pista del Carpena.

Se movía bien, aunque, por más que pusiera empeño, Sinner es inmisericorde. Más todavía en pista dura. Es el rey de la velocidad. Encuentra siempre un resquicio que no tapa su rival. Y si no lo hay, se lo fabrica. No importa que la pelota le venga desviada por la red, que esté obligado a golpear a bote pronto, o Baez le envíe un ganador a la esquina. Llega a todos los rincones con su plasticidad.

Desespera al rival. Tanto es así, que Filippo Volandri decide que doble esfuerzos y forme dupla con Berrettini para amarrar el punto definitivo en el dobles. Ambos niegan cualquier conato de insurrección argentina. Especialmente cuando el tándem argentino se pone con break a favor. Saque potente de Berrettini y cruzada de Sinner. Solucionado.

Puño en alto, y raquetazo a la grada del Carpena. Festeja Italia, Sonríe Jannik que no cesa en su empeño de redondear con la Davis un año excelso. El pastel de los Grand Slam se ha repartido de manera equitativa, pero nadie ha ganado más que él en el resto del circuito. Es el primer tenista italiano en coronar la cima del ranking ATP. Su hambre no se salda. Triunfo tras triunfo. A dos más de otra Ensaladera. «I-ta-lia», grita el Carpena.