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El Real Madrid vigila en la sombra a Mbappé

El Real Madrid que no se ha olvidado de Kylian Mbappé. Desde el Santiago Bernabéu son muy conscientes que mientras el mercado se vaya agotando y el delantero no rubrique su firma en el contrato del PSG, estará más cerca de vestir de blanco.

Durante todo el periodo de fichajes el joven jugador se ha convertido en el auténtico culebrón veraniego. Ha estado muy cerca de vestir de blanco en alguna etapa. Tan próximo como ha estado de enfundarse la zamarra parisina. Pero la realidad es que los días han ido pasando y cuando se encaran los momentos más determinantes Mbappé sigue siendo jugador del Mónaco.

El Real Madrid cuenta a su favor con el sí del jugador. El deseo de Kylian siempre ha sido marcar goles en el Bernabéu. Pero el PSG tiene de su lado a papá Mbappé. Wilfried lleva semanas cautivado por los ceros que los franceses ponen en el contrato de su hijo.

Difícil competir ante poderoso caballero piensa el campeón de Europa. «No nos vamos a hipotecar por él», piensan los dirigente, pero aún creen tener un último cartucho. Sin agobios, la conquista de las dos Supercopas da tranquilidad, no se descarta lanzar una ofensiva final por Mbappé si sigue sin firmar por el PSG.

Los próximos días se antojan claves. Desde el club creen que tras el duelo ante el Valencia, con cinco días de mercado por delante, será el momento decisivo de una operación que, como era de esperar, se va a resolver sobre la bocina.

Situación complicada en Mónaco

No obstante, desde el Santiago Bernabéu no descartan tampoco una renovación  con el Mónaco, que cada vez parece más compleja. La ampliación de contrato de Mbappé sería sinónimo de pintar el futuro de uno de los futbolistas más prometedores de actualidad de blanco. Jugaría un año más en el Mónaco, otra idea que gusta por Concha Espina, y el próximo año, tras el Mundial de Rusia, daría el salto definitivo.

Además, hay que recordar que el Mónaco vendería con mucho más agrado a su perla al Real Madrid, club con el que mantiene una excelente relación, que al PSG, máximo rival por el campeonato francés.

Sin embargo, lo ocurrido en las últimas semana no ayuda. El jugador se ha visto primero ‘abandonado’ en el banquillo, luego fuera de la convocatoria, después ha tenido una pelea con su compañero Raggi y por último ha visto como los ultras han cargado contra él en un comunicado oficial. El tiempo se acaba, pero lo mejor puede estar por venir.