El Real Madrid, un año sin rojas

El 23 de diciembre 2017 fue la última vez que el Real Madrid jugó en inferioridad numérica un partido. Dani Carvajal veía la roja directa en el Clásico que se celebró en el Santiago Bernabéu después de evitar un gol sobre la línea de la portería con la mano. 366 días después y con el VAR como gran aliado, ningún jugador blanco ha sido expulsado.

En este tiempo el Real Madrid ha disputado 60 partidos oficiales (los últimos 33 del pasado curso más los 27 del actual). Alguno de ellos de máxima tensión, como la final de la Champions ante el Liverpool que terminó con la Decimotercera en las vitrinas del estadio Santiago Bernabéu.

La llegada del VAR a la Liga ha ayudado a un Real Madrid que ha sido machacado sin miramientos por los árbitros en el campeonato nacional. La tecnología no ha evitado que algún colegiado con ganas de hacer daño siga perjudicando al campeón de Europa y del mundo, pero sí ha provocado que se lo tengan que pensar dos veces a la hora de tomar alguna decisión incorrecta y dañina.

Por otro lado, el Barcelona con el VAR sí ha visto una roja. Ivan Rakitic fue expulsado por doble amarilla en el último duelo que midió a los azulgranas con el Betis en el Camp Nou tras una fuerte entrada a Lo Celso. Parece que la tecnología ha dejado en el monte del olvido esos tiempos en los que los catalanes campaban a sus anchas por la Liga y rompían todos los récords de la impunidad. Se tiraron casi cuatro años sin ver una roja hasta que Mascherano –que había merecido varias por el camino– acabó con la plusmarca.