Rafa Nadal se enfadó en el podio al ver una bandera estelada en la entrega de medallas

Rafa Nadal es marca España. Siempre ha presumido de su Manacor natal y de su isla de Mallorca, pero siempre se ha sentido más español que nadie. Posiblemente, Rafa Nadal sea una de las personas que más ha hecho por difundir la imagen de España como un país moderno, competivivo, luchador, ganador, educado y abierto a todo el mundo. Rafa Nadal, mallorquín a mucha honra, respira España por todos los poros.

Por eso a Rafa Nadal no le hizo ni pizca de gracia ver una bandera estelada en la entrega de medallas tras ganar el oro en dobles. Después de uno de los partidos más emocionantes de su vida y de uno de los triunfos que más ilusión le hacía a Nadal se le borró la enorme sonrisa del rostro en cuando vio la bandera independentista catalana en el graderío del Estadio de Tenis de Río de Janeiro.

La imagen de Rafa Nadal vale más que mil palabras, que mil censuras o que mil declaraciones altisonantes. Rafa giraba la cabeza a uno y a otro lado, negando y diciéndole al mundo que eso no está bien. Nadal no quiere que ningún independentista haga publicidad a su costa y menos aún en una entrega de medallas de unos Juegos Olímpicos. Nadal compite por y para España, igual que cada uno de los deportistas que están en Río, y por eso su enfado enorme con la escenita de la estelada.

Sin embargo, ni un millón de esteladas financiadas por la CUP y sus amigos independentistas iban a arruinar a Rafa Nadal uno de los momentos más felices de su vida: su segundo oro olímpico. Y defendiendo la bandera de España, la bandera de todos los españoles, hasta de los independentistas.