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Miguel Ángel López es el nuevo líder

Madrazo da la sorpresa en Javalambre y logra la primera victoria española en la Vuelta

La primera victoria española en la Vuelta a España responde al nombre de Ángel Madrazo. El combativo corredor de Burgos BH rompió todos los pronósticos en la subida al Observatorio Astrofísico de Javalambre, superando a sus compañeros de fuga y confirmándose como uno de los grandes protagonistas de la primera semana de carrera. Miguel Ángel López, que entró en solitario tras los fugados, es de nuevo el líder de la clasificación general.

Una reducida fuga con distinto planteamiento entre sus miembros partió desde los primeros kilómetros con ventaja sobre el pelotón. Mientras José Herrada y el holandés Jetse Bol se distanciaban dispuestos a pelear por la complicada opción de disputar la etapa, Ángel Madrazo, compañero de Bol, se infiltraba en una nueva escapada aparentemente en busca de seguir sumando puntos de cara al maillot de la montaña.

El conformismo del pelotón, donde sólo tiraron intermitentemente UAE y Sunweb, permitió la ampliación de la diferencia de la escapada, que en un plumazo se encontró con opciones de luchar por la etapa en la última subida, Javalambre, primer coloso de la Vuelta y ascensión inédita, algo que podía ejercer de arma de doble filo entre los favoritos de la general.

La distancia del pelotón sobre la fuga se redujo y las hostilidades comenzaron entre los candidatos. Valverde, siempre valiente en las montañas de la Vuelta, dio el primer estacazo, al que sólo pudieron responder los miembros de Jumbo Visma y Pogacar, además de un Miguel Ángel López que respondió con un nuevo ataque que le coronó como el más fuerte de los favoritos. Quintana, Chaves o Urán no podían responder a los ataques de los más fuertes.

La distancia se reducía con respecto a la fuga, pero no lo suficiente como para pelear por el triunfo parcial. Madrazo sufría y hacía la goma una y otra vez, pero nunca cejó en su empeño de luchar por la etapa, conocedor de su potente rush final. Finalmente, y viendo que Bol y Herrada no llevaban las mejores piernas, el Gorrión se recuperó y dio el estacazo definitivo a 500 metros del final, logrando la primera victoria española de la ronda con sólo cinco etapas disputadas.