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Sólo usando un vaso tu lavavajillas limpiará como el primer día

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

El lavavajillas es uno de los electrodomésticos más utilizados en el hogar, ya que hace muchísimo más sencilla la tarea de limpiar los platos, vasos y cubiertos. Claro que para conseguir los resultados de limpieza deseados es fundamental conocer algunos trucos, como este que se ha hecho viral en redes sociales. Un método que con solo dos productos permite sustituir a las tradicionales pastillas de lavavajillas.

Para aplicar este truco solo necesitas vinagre blanco y bicarbonato de sodio, dos productos ampliamente utilizados en la limpieza del hogar por sus propiedades desinfectantes y desengrasantes. En este caso, tiene que empezar espolvoreando el bicarbonato de sodio por el lavavajillas y dejando un poco apilado en la rejillas, el fondo y la cesta para lo cubiertos. Aproximadamente necesitarás media taza de bicarbonato.

A continuación, llena un vaso de vinagre blanco y colócalo en el centro de la rejilla superior del lavavajillas. Inicia el ciclo de lavado, ¡y listo! El vinagre blanco y el bicarbonato actuarán de la misma manera que las pastillas de lavavajillas, quitando la grasa y desinfectando todo lo que haya metido.

Una vez finalizado el ciclo de lavado, verás cómo los platos, cubiertos y vasos están limpios, completamente libres de grasa y con un olor muy agradable. Con este truco podrás ahorrarte muchísimo dinero, ya que el vinagre blanco y el bicarbonato de sodio tienen un precio considerablemente más bajo que el de la patilla de lavavajillas.

Conejos para usar el lavavajillas

Uno de los mitos más extendidos es la necesidad de enjuagar los platos antes de colocarlos en el lavavajillas. Pero es completamente innecesario por dos motivos. En primer lugar, porque supone un gasto de agua. Y, en segundo lugar, porque haciendo esto se van a lavar peor en el lavavajillas.

La vajilla hay que colocarla siguiendo un orden muy concreto. Cada cosa tiene que estar en su sitio y bien colocada para que la limpieza sea óptima. Pon los platos en la bandeja inferior mirando hacia el interior para que el chorro de agua incida directamente donde se sirve la comida. Mientras, los recipientes de plástico tienen que ir en la bandeja superior, alejados lo más posible de la resistencia. En cuanto a los cubiertos, es esencial que haya espacio entre ellos.

Una vez finalizado el ciclo de lavado, no saques inmediatamente la vajilla. Abre un poco la puerta, coloca un trapo para que absorba la humedad y espera 5 o 10 minutos.