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La razón por la que estas zonas de España no deberían cambiar al horario de invierno

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Ahora que se acerca el cambio al horario de invierno en España, vuelve a cobrar fuerza el debate sobre la conveniencia de mantener o modificar el huso horario. ¿Debería España ajustarse al huso horario que le corresponde geográficamente, como ocurre con las Islas Canarias? Y si no, ¿cuáles son las comunidades que sí están en su huso natural y cuáles deberían reconsiderarlo?

España se rige actualmente por la hora de Europa Central (CET, UTC+1), mientras que geográficamente la mayor parte del país debería ajustarse al huso horario occidental (WET, UTC+0), el mismo que utilizan Portugal y Reino Unido. La única excepción en la actualidad es Canarias, que sigue el huso horario que le corresponde según su posición geográfica. La decisión de adelantar una hora en la península se remonta a 1940, cuando Francisco Franco decidió sincronizar la hora oficial española con la de Alemania nazi y sus aliados.

Las zonas de España que no deberían cambiar al horario de invierno

Para entender la situación, lo primero considerar la posición geográfica de España respecto al meridiano de Greenwich. Este meridiano atraviesa parte de Aragón, dividiendo el país en una zona occidental y otra central. Las Islas Canarias se encuentran completamente al oeste y coinciden con el huso horario WET.

Sin embargo, la península está dividida: mientras que Galicia, Extremadura y parte de Castilla y León deberían ajustarse al UTC+0, otras zonas como Cataluña y las Islas Baleares sí se encuentran dentro del huso horario UTC+1 de acuerdo a su ubicación. Esto significa que no todas las regiones sufren el mismo desfase con respecto a la luz solar.

El impacto del desfase horario no es sólo teórico. «Al variar el horario en que nos levantamos o acostamos, nuestro cuerpo necesita tiempo para amoldarse. Al haber más horas de luz solar se produce una alteración en la secreción de melatonina (hormona que regula los estados de vigilia-sueño en función de la luz solar). Se reduce su producción y la consecuencia directa es que el sueño se induce más tarde. En consecuencia, se modifican nuestros patrones de sueño, haciendo que muchas personas experimenten dificultades para conciliar el sueño o somnolencia diurna en los días posteriores al cambio», explica Santalucía Seguros.

Y añade: «la variación de estos ritmos puede provocar, al mismo tiempo, una serie de síntomas como astenia (cansancio), irritabilidad, cierta melancolía, cefaleas, nerviosismo y problemas para mantener la atención y concentración, así como apatía y, en algunos casos, incluso una ligera depresión o distimia (estado de ánimo deprimido) en los casos más extremos».

En este contexto, las tres comunidades que no deberían cambiar al horario de invierno son Canarias, Cataluña e Islas Baleares. Canarias se encuentra naturalmente en UTC+0 y no tiene desfase con la luz solar. Cataluña e Islas Baleares, situadas en la parte este de España, se ajustan relativamente bien al UTC+1, que coincide con el horario central europeo. El resto de la península, en cambio, especialmente Galicia, Asturias, Extremadura y Andalucía occidental, experimenta un desfase considerable que afecta tanto a la salud como a la productividad.

La fecha límite

La Comisión Europea propuso en 2018 acabar con el cambio de hora en todos los países de la Unión Europea tras una consulta pública en la que participaron millones de ciudadanos europeos y alto porcentaje manifestó que quería armonizar los horarios.  La idea principal era que cada país decidiera si quería mantenerse de forma permanente en el horario de verano o en el horario de invierno.

«La Comisión Europea propone una nueva Directiva para suprimir el cambio de horario estacional. Los Estados miembros podrían elegir su hora oficial como antes, pero, conforme a la propuesta, mantendrían la misma hora a lo largo de todo el año. Según la propuesta de la Comisión, el argumento original para cambiar la hora en el reloj, esto es, ahorrar energía, ya no es válido. La Comisión expone también que su propuesta refleja el resultado de una consulta pública realizada en 2018 y responde a las cuestiones planteadas por los ciudadanos europeos, el Parlamento Europeo y un número cada vez mayor de Estados miembros en relación con la necesidad de seguir cambiando la hora en el reloj».

Sin embargo, hasta la fecha no se ha alcanzado un acuerdo común entre los países miembros. Algunos países del norte de Europa prefieren mantener el horario de verano para aprovechar más luz en la tarde, mientras que países más al sur optan por el horario de invierno, ya que consideran que se ajusta mejor a la luz solar y a los ritmos biológicos de la población.

En España, el Boletín Oficial del Estado (BOE) establece que el cambio horario debe mantenerse como mínimo hasta 2026. Los expertos señalan que, cuando se implemente la medida, será crucial determinar qué horario es el más adecuado para cada región, ya que la geografía española hace que el horario solar real varíe considerablemente entre el este y el oeste del país.