El pueblo español que te llevará a otra época con sus miles de casas-cueva subterráneas

Este verano millones de españoles se desplazarán por la península ibérica y el extranjero. Con la llegada de las vacaciones de verano, ciento de miles de personas pasarán unos días de merecido descanso en otras localidades y una de las que está de moda en los últimos años tiene que ver con un pueblo de Andalucía que cuenta sus turistas por miles por sus casas-cuevas. Este es el pueblo de Guadix y es uno de los más de moda de una comunidad autónoma que sigue al alza año tras año.

Andalucía es una de las grandes joyas que tiene España y una de las más visitadas del territorio español. Los números no mienten en 2023 la visitaron 34.207.864 turistas batiendo todo tipo de récords desde que hay registros. Esto supuso un aumento del 10,8% respecto de 2022, y del 5,2% respecto de 2019, época anterior a una pandemia que lo paralizó todo.

Sevilla, Córdoba, Granada, Málaga o Cádiz son los grandes tesoros que tiene Andalucía, pero esta comunidad autónoma también tiene joyas escondidas que no todo el mundo conoce. Sus miles de pueblos dan un encanto especial a una tierra donde la cultura, clima, gastronomía e historia se unen para crear un entorno único que tienes que visitar sí o sí al menos una vez en la vida. Uno de estos pueblos menos conocidos pero que te encantará para pasar unos días de vacaciones es la localidad de Guadix, que se caracteriza por su gran número de casas-cueva.

Guadix y sus casas-cuevas subterráneas

Guadix es una localidad de cerca de 20.000 habitantes localizada en la provincia de Granada y que, como colonia romana que fue en su día, cuenta con una gran historia para tratarse de un pueblo ubicado en el interior de Andalucía. Cada año cuenta con cientos de miles de turistas por su cercanía con la capital, Granada, y por sus casas-cueva subterráneas ubicada en el barrio de Las Cuevas en el que se ubican cerca de 2.000 viviendas bajo tierra que le convirtió en su día en «Capital Europea de las Cuevas».

«Guadix ‘la Ciudad Mitrada’, cruce de caminos y culturas milenarias, ciudad de referencia en Andalucía oriental, guarda un tesoro escondido en la entrañas de la tierra: LAS CASAS CUEVA. Con todo el rico patrimonio arquitectónico y urbanístico que encierra esta ciudad, nada hay tan sorprendente y excepcional como su famoso barrio de las Cuevas, cuya extensión rebasa a la del propio casco histórico, en un paraje de absoluta rareza», así es como se define a Guadix la página web oficial de una localidad  que presume del barrio de Las Cuevas, uno de los más simbólicos de España, Europa e incluso puede que del mundo.

De este a oeste de la localidad y en un formato de arco, se ubica el barrio de Las Cuevas en el que hay 2.000 casas-cueva fabricadas con arcilla que tiene todas las condiciones de habitabilidad de una vivienda tradicional de hoy en día. «La tradición troglodita en Guadix, se remonta a historia de romanos y árabes, pues este hábitat surge tras la reconquista cristiana por parte de los Reyes Católicos, y fue refugio de las minorías no integradas en la vida de la ciudad monumental», informa el portal oficial de la localidad.

Por ello, se excavaron a mano (los llamados picadores) una serie de viviendas en territorio arcilloso que ahora hace que la foto de la ciudad plagada de casas-cueva de color blanco sean conocidas en todo el mundo. «Entre cal y arcilla, viento y esparto, surge un bosque de blancas chimeneas, testigo inalterable de la vida interior de nuestro suelo. Cobijo de propios y extraños, Guadix te abre sus cuevas como abre sus brazos. Porque preservamos la esencia de nuestra tierra, nuestra tierra te quiere», reza la web.

Dentro de este barrio de Las Cuevas también se ubica la Cueva Santuario de la Virgen de Gracia, patrona del Barrio de las Cuevas desde el siglo XVIII, la Iglesia de la Virgen de Fátima y la casa-cueva que rinde tributo al Padre Pedro Poveda, que tuvo una gran influencia en la evangelización de la ciudad en el siglo XX. En la localidad también destacan los museos como  la Fundación Pintor Julio Visconti, el Centro de Estudios «Pedro Suárez» y  la Sala Alarconiana en el Palacio de Peñaflor dedicada a la figura de Pedro Antonio de Alarcón.