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Está al lado de Madrid y es de los más bonitos del mundo: el pueblo que recomienda la Organización Mundial del Turismo

  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

La Organización Mundial del Turismo ha destacado un pueblo situado muy cerca de Madrid como uno de los más bonitos del mundo. Una recomendación que invita a redescubrir lo que tenemos a pocos kilómetros de casa y que pone en valor el patrimonio, la historia y la belleza del interior de España.

Este reconocimiento supone una oportunidad para apostar por escapadas de proximidad, perfectas para quienes buscan destinos con encanto sin necesidad de recorrer largas distancias. Nuestro país ofrece una riqueza cultural, natural y gastronómica que no deja de sorprender, incluso en lugares que creíamos conocer.

La tendencia a redescubrir el entorno más cercano va en aumento, y este tipo de reconocimientos internacionales refuerzan esa idea. Viajar por el interior, disfrutar del ritmo pausado de los pueblos y dejarse sorprender por rincones llenos de autenticidad es una forma de viajar que gana fuerza y sentido.

Es el momento de planear nuevas rutas y abrirse a experiencias que, sin alejarnos demasiado, pueden dejarnos huella. A veces, lo extraordinario está mucho más cerca de lo que imaginamos.

Es de los más bonitos del mundo y está al lado de Madrid

No hace falta viajar lejos de la capital de España para descubrir uno de esos pueblos que enamora. En esencia, lo que necesitamos es empezar a cuidar una serie de detalles que pueden acabar marcando una diferencia importante en estos últimos días que nos están esperando.

Estamos ante un viaje que podemos hacer siempre que queramos sin necesidad de invertir de más. Sólo gastando lo mínimo, podemos acabar obteniendo un plus de buenas sensaciones, con la ayuda de un elemento que puede acabar siendo el que mejor se adapte a nuestras necesidades.

Es hora de dejar salir un cambio de tendencia que nos ayuda a todos. Viajar por España, deja ese dinero que tenemos entre manos en negocios nacionales, algo importante en estos tiempos en los que cada euro cuenta. Invertir en nosotros mismos, puede acabar siendo una forma de ayudarnos los unos a los otros, de una manera que debemos tener en consideración y es algo esencial.

Por lo que, habrá llegado el momento de aprovechar al máximo determinados elementos que serán los que nos acompañarán en estas jornadas en las que todo puede ser posible.

El pueblo que recomienda la Organización Mundial del Turismo

La Organización Mundial del Turismo recomienda un pueblo que puede estar más cerca de lo que nos imaginaríamos. Teniendo en cuenta que estamos ante un elemento que, sin duda alguna, podrá acabar siendo el que mejor se adapte a unas necesidades que serán fundamentales.

‘Best Tourism Villages’ determina que Sigüenza es uno de los pueblos más bonitos del mundo, que nos queda especialmente cerca. Tal y como se presenta este pueblo en la web de Turismo de Castilla-La Mancha: «Sigüenza es una ciudad situada estratégicamente para controlar el paso del alto Henares y los valles de los ríos Dulce y Salado. Esta es la razón por la que estuvo poblada ya desde el Paleolítico y Neolítico. Visitar Sigüenza es visitar la historia en cada uno de los pliegues del tiempo. Tras los vestigios de antiguos pobladores: celtíberos, romanos, visigodos y árabes; se impone una Sigüenza medieval que secuestra la mirada ya en la primera vista general. El castillo domina la ciudad, la postal y contiene en sus cimientos, que ascienden hasta sus almenas, secretos de sus pobladores, que fueron todos. La Casa del Doncel, de obligada visita; La iglesia de San Vicente o de Santiago, los restos de murallas imbricados por la ciudad; la catedral, con su imponente interior de bóvedas y mausoleos… completan el puzle de este periodo. Su Catedral es una visita imprescindible. Es, en conjunto, un bello ejemplar del cisterciense o primer gótico y en ella merecen especial interés: las Capillas de los Arces, de San Pedro, de la Anunciación, o de San Marcos, la estatua del Doncel y rosetones góticos de los siglos XII-XVI. Conviene no perderse la parte renacentista y barroca que se imprime en las calles y plazas, que se refleja en palacios y casas, que se percibe en conventos y ermitas. Esta Sigüenza la encontramos en la Plaza Mayor o el Barrio Humanista, en la casa Plateresca o el Palacio Episcopal, en el Convento de San Francisco o Nuestra Señora de los Huertos… y en cada uno nos detendrá el paso la observación de sus fachadas, la visita interior o el descanso bajo las arquerías».

Por lo que, podemos descubrir un plus de buenas sensaciones en este lugar tan especial de nuestro país, que, sin duda alguna, deberemos empezar a visitar. Cerca de casa y con un patrimonio que impresiona.