Cultura

Los excrementos del caballo de Aníbal indican el lugar por el que entró a Roma

La ruta por los Alpes que utilizó Aníbal, con su ejército de elefantes para invadir Roma, ha sido objeto de un debate histórico durante más de 2.000 años.

Recientemente un grupo de científicos que analizaron muestras de excremento de caballo milenarias afirman que tienen la respuesta sobre la ruta de Aníbal.

Más de 15.000 caballos y 37 elefantes acompañaron al poderoso ejército compuesto por 30.000 hombres que atacaron Roma en el año 218 antes de Cristo.

Conducir a un ejército con tantos animales no fue una tarea fácil y los historiadores han debatido durante años sobre cuál fue la ruta exacta que utilizaron los cartaginenses de Aníbal para poder llegar a Roma.

«Ahora parece que lo logramos, todo gracias a la ciencia moderna y a un poco de caca de caballo», dijo Chris Allen, un microbiólogo de la Queen’s University de Belfast.

Allen formó parte de un equipo internacional encabezado por Bill Mahaney de la Universidad de York, en Toronto. Los investigadores descubrieron un depósito de excremento animal en el estrecho paso montañoso de Col de la Traversette, cerca de la frontera entre Francia e Italia.

Los análisis de los isótopos de carbono revelaron que las muestran datan del año 200 antes de Cristo, y en ellas los científicos encontraron rastros de la presencia de clostridia, una bacteria que se encuentra en el excremento de los caballos.

Para los investigadores, esta puede ser la primera evidencia tangible de actividad tanto humana como animal en la época que Aníbal invadió Italia.

«Aunque no podemos determinar de manera concluyente que la evidencia pertenece a Aníbal, los resultados coinciden con el paso de una gran cantidad de animales y de personas, que debido a la altura, no constituyen una práctica habitual en la zona», señaló el estudio publicado en la revista Archaeometry.

Los investigadores dijeron que se necesitaban realizar más estudios en terreno para encontrar herramientas como hebillas de cinturones, dagas o monedas para confirmar la presencia de Aníbal.