Cultura
Estreno del documental

Clint Eastwood, Ennio Morricone y Metallica se conjuran para ‘desenterrar’ el cementerio de Sad Hill

Un documental que homenajea a los creadores del 'spaghetti western'

Cientos de personas han ayudado de muchas maneras a volver a colocar las tumbas

El documental ‘Desenterrando Sad Hill’ se estrena este viernes en los mejores cines de España. Narra la historia de un grupo de aficionados del mítico film ‘El bueno, el feo y el malo’, de Sergio Leone, para recuperar el cementerio ‘western’ de la cinta, ubicado en Burgos.

Entre los municipios castellanos de Santo Domingo de Silos, Contreras, Barbadillo del Mercado y Salas de los Infantes se ubican las miles de tumbas de la escena final de la película de Leone.

En octubre de 2015, un reducido grupo de fans de la película de Sergio Leone, acudieron a la localización de la escena final de la película en Burgos. Casi 50 años después del rodaje, han creado un movimiento para desenterrar y devolver el esplendor del mítico cementerio de Sad Hill. La escena final de ‘El bueno, el feo y el malo’ es una de las más aplaudidas de la historia del cine. La música de ‘El éxtasis del oro’ de Ennio Morricone acompaña al trío protagonista. Ahora esa música es legendaria para grupos como Metallica ya que la tocan al comienzo de cada uno de sus conciertos.

Uno de los protagonistas en 1966 fue Clint Eastwood. El ahora director, junto al compositor musical Ennio Morricone y el cantante de Metallica, James Hetfield se han unido al proyecto. Todos ellos aparecen en el documental dirigido por el gallego Guillermo Oliveira para recordar algunas de las anécdotas del rodaje que tuvo lugar hace ya más de 50 años.

«Es una película muy especial y es difícil explicar por qué, pero lo cierto es que tanto tiempo después la gente va a visitar el cementerio y sigue poniendo cruces. El cine te marca de una forma que te condiciona y cada persona que ha ayudado a reconstruir ese cementerio tenía una historia detrás con la película», ha señalado en una entrevista con Europa Press el director del documental.

Cuando Oliveira se enteró en 2015 que una asociación había recibido el permiso de la Junta de Castilla y León para recuperar el cementerio de Sad Hill, compró un dron y se decidió a dejar registro audiovisual de esta historia. «Mi idea era ir a grabar un par de fines de semana, pero no me esperaba que fuera a alargarse tanto y ni mucho menos que se convirtiera en un fenómeno que arrastrara a aficionados de la película desde países como Italia o Francia», ha apuntado.

Recuperación piedra a piedra

A lo largo de un par de años, esta asociación limpió de vegetación y repuso piedra por piedra la zona donde se enfrentaron Eastwood, Lee Van Cleef y Eli Wallach en un mítico desafío. Oliveira decidió que para acompañar este proceso podría ponerse en contacto con algunos de los protagonistas de la película para que comentaran sus impresiones del rodaje.

Fotograma de la escena del cementerio. (Foto. EP)

«Es muy difícil llegar a esta gente, porque están muy protegidos: lo difícil no es convencerlos a ellos, sino a esas personas que les rodean. Además, se trata de gente que sigue trabajando y no vive de que les hagan homenajes», ha apuntado Oliveira.

A esta se sumó un inconveniente más: la excéntrica personalidad de Morricone, a quien «no le gusta nada» hablar de sus westerns con Leone. «Es que dice que ha hecho bandas sonoras para 550 películas y siempre le preguntan por ella y no por ‘Cinema Paradiso’ o ‘La misión’, por poner dos ejemplos», ha comentado el realizador.

Visita a Morricone

Una botella de vino, un documental de Paco de Lucía y la colaboración inestimable de la mujer de Morricone sirvieron para pasar unos minutos con el compositor italiano, quien al final llegó incluso a enseñar al equipo de rodaje su estudio lleno de estatuillas de Oscar. «Después de viajar a Italia salió en chándal y nos dijo que no quería hacer entrevistas, pero su mujer le hizo cambiar de opinión con promesas culinarias», ha comentado con humor el realizador.

El resultado es un documental que en cierta forma también homenajea a los creadores del ‘spaghetti western’, un género denostado durante varias décadas. «Leone consiguió con pocos elementos crear un imaginario nuevo y renutre de vida un género de capa caída. Creo que el ‘spaghetti western’ es hoy mucho más influyente que el western», ha concluido.