Comunidad Valenciana
ACTUACIÓN MUSICAL

Los Meconios mantienen su concierto en Valencia: «No nos vamos a dejar amedrentar por el PSOE»

El PSOE valenciano amenazó con vigilar el concierto de Los Meconios para denunciarlos por «delito de odio»

Los Meconios sobre el concierto de Valencia: "Lo han convertido en un canto a la libertad de expresión"

Los Meconios, el dúo valenciano formado por Sergio C. Martínez y Mario Camps, han anunciado a través de su perfil de X, antes Twitter, que su concierto en los jardines del Palau de Valencia, previsto para este 25 de julio «no se va a cancelar». Los Meconios recuerdan que el PSOE valenciano «ha amenazado con vigilar el concierto» y denunciarlos «ante un posible delito de odio». Pero agregan su decisión de dar un paso adelante: «No nos vamos a dejar amedrentar por sus amenazas». Los Meconios añaden que el de Valencia «ya no es un simple concierto, lo han convertido en un canto a la libertad de expresión». Y sostienen que ante el intento de cancelación del concierto «hay que alzar la voz con más fuerza y reivindicar los derechos que nos están intentando arrebatar».

Estas manifestaciones del citado grupo forman parte del punto 5 último de un comunicado en que advierten que no van a dudar en emprender aciones legales contra «quien mienta de manera intencionada y falte a la verdad con el objetivo de dañarnos». «La verdad siempre debe prevalecer y vamos a luchar por lo que es justo», advierten también en el punto cuarto de ese comunicado.

Los Meconios, además, han decidido no interpretar en Valencia «Vamos a volver al 36». Una canción de la que afirman que no es suya, sino de InfoVlogger. Y que ese tema «ni hace apología de la dictadura ni del golpe de Estado». «Basta con leer la letra para comprobarlo», añaden.

Manifiestan tajantemente que: «Jamás hemos incitado al acoso a nadie». Y agrega que sus sátiras y parodias «se están sacando completamente de contexto con el fin de infundir en la opinión pública una imagen» suya «completamente distorsionada». Y avisan de que ni se avergüenzan de sus trabajos ni van a tolerar tampoco lo que consideran «una manipulación».