El Rey a los vecinos de Paioporta: «He venido para saber de primera mano por qué no tenéis más ayuda»
Felipe VI pide que le retiren la protección de los paraguas para comunicarse con la muchedumbre que protestaba y lanzaba objetos
Afectado pero firme en su propósito, el Rey Felipe VI ha preferido mantenerse en Paiporta y no retirarse ante la explosión de indignación de las víctimas y voluntarios que trabajan desde hace días en la localidad arrasada por la DANA. Tras aguantar el lanzamiento de barro por parte de víctimas de la riada, los gritos e insultos, Felipe VI ha solicitado en varias ocasiones hablar con los vecinos que le increpaban y así lo ha hecho: «Quiero saber de primera mano el por qué no ha llegado antes toda la ayuda que reclaman».
El Rey ha soportado una lluvia de barro, de madera e hierros pero no se ha retirado y ha exhortado a que bajara a conversar a un joven que le increpaba desde el balcón de un segundo piso. En medio de la lluvia de insultos y objetos a los políticos y a los Reyes, Felipe VI ha pedido a sus escoltas que le retiraran los paraguas que le protegían, para contactar de forma directa con los indignados que le exigían que cogiera una pala y se pusiera a limpiar.
Los Reyes querían llegar antes
Desde el principio de la tragedia de la DANA el deseo de los Reyes era visitar cuanto antes la zona afectada por la catástrofe, sin embargo sus asesores más estrechos han retrasado el viaje real durante un par de días a las zonas afectadas.
Cuando hoy, cinco después de los hechos han llegado a Paiporta las autoridades, el caos se ha adueñado de la situación. La comitiva se ha roto desde el principio y en la cabeza han quedado aislados el monarca y el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, separados del resto. Durante el recorrido, decenas de personas les han gritado y lanzado objetos y barro, mientras policías y guardias civiles han tratado de contenerles y proteger a las autoridades.
La Reina: «Tenéis razón»
Durante los altercados, Pedro Sánchez ha asistido a la Reia que ha roto a llorar, mientras Felipe VI y Mazón se han parado a hablar con varias personas. Minutos después, Letizia se acercaba a otro grupo de víctimas y se le ha visto compungida abrazando a algunos afectados. Se ha escuchado perfectamente a la Reina decirle a una de las mujeres indignadas: «Tenéis toda la razón». Por su lado, Felipe VI hacía lo mismo con otros afectados.
Tanto al Rey como al jefe del Consell se les ha visto con manchas de barro en la cara y en la ropa. Se han escuchado gritos de «asesinos», «fuera», «ayuda», ‘Mazón dimisión’ o «Pedro Sánchez dimisión».
A pesar de lo ocurrido en Paiporta, los Reyes no han querido suspender su siguiente visita al municipio de Chiva, allí se han encaminado, mientras varios vecinos y voluntarios destrozaban el vehículo del presidente del Gobierno.
El equipo de seguridad de Pedro Sánchez decidió retirarlo de la comitiva tras evaluar después de que recibiera un golpe en la espalda con un objeto similar a un palo. A partir de ese momento, sus guardaespaldas lo escoltaron hasta el coche oficial, pero un grupo de vecinos siguió al presidente y a su equipo, increpándolo sin cesar, golpeando el vehículo y destrozando sus lunas.
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