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Medidas domésticas que ayudan a revertir el cambio climático

Revertir el cambio climático parece algo difícil que queda fuera del alcance del ciudadano de a pie. Sin embargo, desde nuestra modesta posición, podemos tomar medidas que ayudan a paliar los efectos de este calentamiento de la Tierra que está teniendo consecuencias muy nocivas, más allá de la subida de temperatura y nivel del mar.

A este ritmo, se ha demostrado que los fenómenos meteorológicos se aceleran siendo cada vez más extremos. Además, diversas especies están desapareciendo y la temperatura está subiendo muy rápido, con consecuencias nefastas, algunas incluso desconocidas.

Así que, si no sabes qué hacer para ayudar al planeta que, al fin y al cabo, es el único que conocemos en el que un ser humano puede vivir y prosperar, nuestro verdadero hogar, toma nota de estas opciones sensatas para echar una mano que es muy necesaria. Entre todos podremos convertir la Tierra en un lugar mejor.

Qué hacer para ayudar a revertir el cambio climático

Por ejemplo, si tu proveedor de energía es muy contaminante, cámbialo por uno que use más energías renovables y menos combustibles fósiles. Al fin y al cabo, gran parte del CO2 que se expulsa a la atmósfera procede de la combustión de gas natural, aceite y carbón.

La ganadería intensiva es otro elemento muy contaminante. De hecho, casi el 15% de las emisiones de gas invernadero proceden del sector animal, principalmente del sector lácteo y vacuno, según la FAO. Así pues, consume menos lácteos y carne.

La ONU informa que una cuarta parte de las emisiones se producen por culpa de la agricultura. ¿Cómo podemos luchar contra esto desde casa? Muy sencillo, no desperdiciando comida. Es así de simple, compra y consume únicamente lo que de verdad necesitas.

El avión es un medio de transporte muy seguro, pero muy contaminante, pues supone el 2% de las emisiones totales. Sin embargo, el tren es bastante más limpio, por lo que es una buena opción, especialmente en medias distancias.

En general, todos deberíamos intentar consumir menos. Gran parte de los recursos naturales de los países se gastan en producir elementos en exceso pero poco necesarios, como smartphones, ropas, etc. Si compramos solo lo que de verdad necesitamos y alargamos la vida del móvil, adquirimos las prendas realmente necesarias, etc., nuestra huella ambiental será menos pronunciada en el planeta.

Y, por supuesto, podemos realizar acciones colectivas para enseñar a otras personas consumo responsable, reciclaje, etc. Entre todos podemos revertir esta situación que tanto daño está haciendo a nuestro mundo y a quienes aquí vivimos.