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Tierra

Los científicos ponen fecha exacta al adiós a la Tierra: se destruirá todo

  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

El adiós a la Tierra ya tiene fecha, según los científicos hay un momento en el que todo quedará destruido. Un auténtico apocalipsis nos está esperando y acabará siendo la puerta de entrada de un nuevo estado en el que no se incluirá nuestra querida Tierra que habrá quedado reducida a la nada. De la misma forma que todos los habitantes que viven en ella y que desaparecerán de forma inmediata cuando este hecho que puede ver como avanza en el tiempo de forma inevitable se acaba produciendo.

El tiempo que tenemos es limitado. La humanidad no es del todo consciente de lo que le está esperando, sino que simplemente debe estar preparado para afrontar algunos cambios que pueden llegar a ser los que marquen una diferencia importante. Un cambio de ciclo que quizás acabará siendo el que marque el inicio de una nueva galaxia sobre los escombros de lo que fue la nuestra. El descubrimiento de un astrónomo que puede cambiar por completo lo que nos está esperando es ya es una realidad. Nadie duda de un descubrimiento que se llevó a cabo hace más de 10 años.

Se destruirá todo

La Biblia habla de ese apocalipsis en el que se pondrá fin a todo. Un final que parece que predijo a la perfección, si tenemos en cuenta lo que dice la ciencia del fin del mundo o en este caso, del final de nuestra galaxia, que parece que ya está marcado en el calendario de los astrofísicos.

Conocer el comportamiento de los astros es algo que siempre nos ha fascinado y se ha convertido en una auténtica necesidad, especialmente si tenemos en cuenta una serie de eventos que se han convertido en una realidad. El universo nos llama y hace que estemos muy pendientes de unos hechos que pueden suceder más pronto de lo que nos imaginamos.

A través de los telescopios nos fijamos directamente en todo lo que sucede a nuestro alrededor y lo hacemos de tal manera que debemos empezar a visualizar un importante cambio que parece que será una realidad. Aunque no lo parezca, la galaxia se mueve a gran velocidad y parece que va directamente a un gran choque que pondría fin a todo. La humanidad, el planeta y todo lo que nos rodea, quedaría reducido a escombros de una manera que no esperaríamos.

La fecha exacta del adiós definitivo a la Tierra

Slipher es el nombre del astrónomo que en 1912 afirmó que nuestra galaxia chocaría directamente con Andrómeda. Un futuro que parece que vio claramente con sus instrumentos en esos años en los que todo podía ser de una manera muy distinta. Especialmente si tenemos en cuenta la forma en la que estos pioneros de la ciencia no dudaron en exponer sus teorías.

La ciencia parece que le ha dado la razón y se puede apreciar ese camino que podría darse dentro de varios millones de años, dada la distancia que nos separa de nuestros vecinos y la velocidad a la que se está produciendo este letal acercamiento que ha sido objeto de numerosos estudios.

Según dicen los estudios más recientes: «Se cree comúnmente que nuestra propia Vía Láctea está en curso de colisión con la vecina galaxia de Andrómeda. Como resultado de su fusión, prevista en unos cinco mil millones de años, las dos grandes galaxias espirales que definen el Grupo Local actual formarían una nueva galaxia elíptica. Aquí consideramos las últimas y más precisas observaciones de los telescopios espaciales Gaia y Hubble, junto con recientes estimaciones de masas por consenso para derivar posibles escenarios futuros e identificar las principales fuentes de incertidumbre en la evolución del Grupo Local durante los próximos 10 mil millones de años. Descubrimos que las siguientes galaxias más masivas del Grupo Local, a saber, M33 y la Gran Nube de Magallanes, afectan de manera clara y radical a la órbita Vía Láctea-Andrómeda. Si bien la inclusión de M33 aumenta la probabilidad de fusión, la órbita de la Gran Nube de Magallanes es perpendicular a la órbita Vía Láctea-Andrómeda y hace que su fusión sea menos probable. En el sistema completo, encontramos que las incertidumbres en las posiciones, movimientos y masas actuales de todas las galaxias dejan lugar a resultados drásticamente diferentes y a una probabilidad cercana al 50% de que no haya una fusión entre la Vía Láctea y Andrómeda durante los próximos 10 mil millones de años».

Por lo que quedan varios miles de años para este terrible desenlace que puede acabar siendo un auténtico apocalipsis. Quizás en ese momento, no quede nada en la Tierra, la humanidad por sí sola o algún asteroide haya acabado por completo con la vida que es uno de los elementos más valiosos que existe y que debemos conservar.