Bebés

Tierno viral: la amistad entre una niña autista y su gato (VÍDEO)

Muchos son los vídeos que en estos momentos se encuentran arrasando en la Red. Sin embargo, pocos como el que ahora se ha convertido en viral logran emocionarnos y permitirnos descubrir hasta qué punto las mascotas pueden llegar a ser piezas fundamentales en la vida de algunas personas. Todo eso lo aprendemos al ver la fuerte y especial amistad que se ha forjado entre una niña de 6 años que sufre autismo y su gato, de raza Maine Coon, llamado Thula.

Los protagonistas

Sin lugar a dudas las grandes estrellas de este viral son dos:

Dos seres que desde el primer momento han conseguido forjar una amistad que no entiende de humanos o animales, sólo de amor y cariño.

La amistad “sanadora”

Al ver las imágenes de sus protagonistas, todos pensamos que se trata de una fuerte relación entre una niña y su felino. Pero no es así, tras esas hay mucho más. Y es que, como ya hemos mencionado, Iris Grace sufre autismo y la llegada a casa de ese animal se ha convertido en un importante revulsivo para su vida y para la enfermedad.

La madre de la menor, Arabella Carter-Johnson, ha afirmado, a través de diversos medios de comunicación, que llevar la mascota al hogar familiar ha sido la mejor decisión que ella y su pareja pudieron tomar. Y es que desde que apareció por la puerta, la niña avanzó de manera notable. Así, por ejemplo, incluso comenzó a hablar, algo que los médicos les habían advertido que no iba a suceder.

Los cambios

El haber visto como la menor se relacionaba durante unas vacaciones en cierta medida con el gato de su tío fue el que llevó a que hace tres años sus padres decidieran que quizás tener una mascota en casa beneficiaría a Iris. Por eso, buscaron y buscaron hasta encontrar a Tula, que ha pasado a ser un miembro más de la familia.

Antes de la llegada del felino, la pequeña se sentía muy insegura ante todo lo que le resultara desconocido, odiaba el agua y rechazaba cualquier otro tipo de elemento que pudiera rozar su piel. Pero todo eso cambió cuando apareció en escena el animal.

En concreto, además de comenzar a hablar como hemos mencionado, la niña dio un sinfín de cambios en su rutina que incluso sus padres actualmente no llegan a creerse que hayan sido posibles:

 

La pintura

Hasta que la mascota llegó a casa la niña había conseguido expresar y desarrollar sus sentimientos a través de la pintura, por iniciativa de su madre, tanto es así que se había convertido en su fundamental sistema de comunicación, pues no hablaba. Sus cuadros comenzaron a venderse por precios elevados y es que tenía un talento innato.

Talento ese que precisamente ahora, gracias a la compañía constante de la gata, Iris ha conseguido desarrollar aún más, ha perfeccionado su estilo, ha explotado aún más sus cualidades y hoy cuenta con una legión de seguidores en todo el mundo, además de continuar vendiéndolos por sumas realmente considerables, que pueden llegar a alcanzar los 2.000 dólares.

Todo lo que te hemos contado es lo que puede apreciarse en este viral, un vídeo que nos muestra cómo la compañía, el cariño y el respeto de un gato han llevado a que una pequeña con autismo pueda avanzar en su enfermedad, logre alcanzar metas en pro de su calidad de vida que se pensaba que jamás iba a conseguir y tenga la oportunidad de conocer la amistad, sí con una mascota, pero es una amistad en estado puro, sin intereses de ningún tipo.