Bebés

Menú para la semana 22 de embarazo

Cuando la embarazada llega a la semana 22 del periodo de gestación lo hace muy feliz, porque ya siente a su bebé, que no para de dar patadas. No obstante, eso no impide que tenga que hacerle frente a una serie notable de síntomas, entre los que se encuentran el gran cansancio que siente y que su barriga es ya claramente prominente. Por eso, debe llevar a cabo una alimentación que no sólo le “cargue las pilas” durante todo el día sino también que impida que su piel se vea perjudicada por ese aumento de volumen.

Para que pueda lograr la dieta perfecta para ese momento, a continuación desde BabyAffinity le damos unas claves muy útiles al respecto, que le permitirán encontrarse en perfecto estado y que ayudarán a que el bebé, que ya pesa unos 340 gramos y que mide unos 20 centímetros, siga creciendo saludablemente:

Desayuno

Como hemos mencionado, en este punto del periodo de gestación, la mujer está especialmente cansada. Por eso, es imprescindible que no sólo ponga en práctica consejos habituales para “cargar” sus pilas sino también que lleve a cabo una alimentación que le dé la energía que necesita. Y esta debe comenzar con el desayuno, en el que debe dotarse de fuerzas para toda la jornada que tiene por delante.

¿Cómo lograrlo? Acometiendo una primera comida completa, saludable y, por supuesto, equilibrada. Por eso, debe contar con lácteos, en forma de vaso de leche semidesnatada que puede estar acompañad por un poquito de café descafeinado o cacao; fruta y cereales. Estos últimos se pueden tomar a través de un pequeño bol de cereales, comiendo una tostada de pan integral con aceite de oliva o bien mediante unas cuantas galletas integrales.

Media mañana

Para que su energía no decaiga en ningún momento, su cuerpo tiene que alimentarse cada cierto tiempo. De ahí que sea imprescindible que a media mañana, en torno a las 11:30 horas, la embarazada tome algún alimento, que además le ayudará a saciar su hambre y a conseguir que el organismo esté funcionando sin problemas.

En ese momento del día lo más aconsejable es que se tome una pieza de fruta, distinta a la que tomó en el desayuno. No obstante, hay gestantes que prefieren comer un puñado de frutos secos o bien incluso una barrita energética. Para gustos, los colores. Eso sí, siempre debe ser una propuesta saludable.

Almuerzo

Después de una mañana intensa, llega el momento de que el cuerpo vuelva a tomar fuerzas para hacerle frente a lo que queda del día. Por eso, antes de dormir un poco de siesta, es recomendable que la mujer lleve a cabo un almuerzo sano y equilibrado. Y eso es algo que puede hacer apostando por comer un plato de pasta con verduras y de postre una fruta o bien sentándose a la mesa para tomar un menú completo: