Qué es el botulismo en los niños
Una enfermedad rara no infecciosa que se presenta en lactantes menores de un año.
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El botulismo infantil, reconocido y descrito por primera vez en California en 1976, es causado por la producción de toxina en el lumen intestinal de los bebés menores de un año. Una enfermedad que además suele relacionarse con el hecho de que le demos miel al bebé antes de tiempo. Veamos ahora Qué es el botulismo en los niños , qué síntomas tiene y el porqué de la miel.
Qué es el botulismo en los niños
Las esporas de los clostridios productoras de toxinas botulínicas, como consecuencia de la inmadurez de la flora intestinal del hospedador y por tanto de la falta de competencia bacteriana, pueden germinar, multiplicarse y producir toxina, que luego es absorbida por la mucosa y, a través de la circulación sanguínea, llega a las terminaciones nerviosas periféricas, donde al bloquear la liberación de acetilcolina, previene la transmisión nerviosa. La enfermedad se manifiesta por una parálisis flácida simétrica descendente, característica de todas las formas de botulismo.
Síntomas del botulismo en los niños
Los síntomas característicos del botulismo en los niños son:
- Hipotonía generalizada.
- Entumecimiento.
- Inquietud.
No control de la cabeza. - Llanto / voz alterada.
- Expresión facial alterada.
- Ptosis palpebral.
- Midriasis
- Dificultad para succionar.
- Regurgitación
- Disnea (dificultad para respirar).
- Estreñimiento (definido como ausencia de evacuaciones intestinales sólidas o gaseosas durante al menos 3 días).
- Retención urinaria.
Factores de riesgo
Los factores predisponentes al botulismo en los niños son:
- Edad, en relación con la maduración de la microbiota intestinal.
- La ralentización del tránsito intestinal, que puede favorecer la colonización de esporas.
- Ingestión de miel, alimento conocido como fuente de esporas.
- El medio ambiente (suelo, polvo, etc.), que juega un papel fundamental como fuente de esporas.
El papel de la miel en niños menores de un año
Ahora está muy extendida entre las madres y los pediatras la precaución de evitar el consumo de miel en los bebés menores de un año para prevenir el botulismo infantil. Si bien es correcto tomar esta precaución, también es útil considerar que este producto natural puede ser consumido por niños mayores de un año y adultos sin ningún riesgo para la salud.
La miel, al ser un producto natural, puede contener las esporas de los clostridios que producen toxinas botulínicas. En este producto, sin embargo, las esporas no pueden germinar, desarrollarse y producir toxinas. Por lo tanto, solo son peligrosos para los bebés menores de un año, ya que el botulismo infantil es causado por las toxinas botulínicas producidas en el lumen intestinal y no por las toxinas preformadas en los alimentos.
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