Andalucía

El incremento de las exportaciones de Marruecos deja en situación «crítica» a los agricultores andaluces

El incremento de las exportaciones de Marruecos, que la pasada campaña agrícola vendió a la UE 500.000 toneladas de tomate, 215.000 más de las acordadas, ha empujado a los agricultores almerienses a una situación «crítica» por el desplome en el precio de sus productos.

Semanas atrás, la situación «insostenible» provocada por las exportaciones mucho más baratas de terceros países provocó que se desecharan 150 toneladas de fruta en la provincia de Almería en señal de protesta. Vox ha denunciado la crisis de precios y ha exigido suspender los acuerdos comerciales con el país norteafricano.

A esto se suma el reetiquetado de productos marroquíes para simular un falso origen andaluz. La Junta ha incoado expedientes sancionadores a 26 empresas de Almería tras las últimas inspecciones.

Ante todo ello, la Asociación de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas de Almería (Coexphal) ha iniciado una campaña bajo el nombre ‘¿Tragamos con todo?’ para reclamar a los supermercados que prioricen el producto nacional frente al de procedencia marroquí . Además, advierten a los clientes: el código de barras 611 identifica a los productos de origen magrebí.

Crisis de precios y rentabilidad

La organización agraria Asaja ha hecho balance de la campaña agrícola 2020-2021 en la provincia de Almería, la cual ha estado marcada por la «inestabilidad» de los precios en productos como el tomate, que con una bajada de superficie de cultivo sigue como el segundo producto hortofrutícola de mayor producción, lo que no ha impedido que haya experimentado una nueva pérdida de rentabilidad, un 5% con respecto la campaña anterior.

Según los datos ofrecidos por Asaja, en la temporada recientemente finalizada se han producido 769.860 toneladas de tomate, lo que supone un 3,6% menos que en el periodo 2019-2020, toda vez que la superficie de cultivo también ha caído hasta las 8.554 hectáreas, esto es, un 7,5% menos. A pesar de ello, es el segundo producto de que más kilos se han obtenido por detrás del pimiento, que del que se cultivaron 990.320 toneladas.

El descenso en el volumen y superficie de producción no ha implicado una mejora de los precios, sino que estos han caído de forma generalizada ya que el valor total del producto ha alcanzado los 446 millones de euros, es decir, un 5% menos que la temporada anterior.

Desde Asaja han expresado su «preocupación» por la evolución de este producto, cuyo precio medio ha caído un 15% respecto a la campaña anterior según sus cálculos. Así, la media de precio del invierno, considerado el «momento fuerte» de la campaña, se ha situado apenas en los 55 céntimos de euro, lo que supone un 19% menos en comparación con la pasada campaña.

«El momento más crítico fue en el mes de febrero, con un precio de apenas 35 céntimos» lo que, según han observado, ha coincidido con un «incremento en las exportaciones de Marruecos».

No obstante, la organización ha reconocido que se han dado resultados «dispares» entre los agricultores, especialmente por el momento elegido para hacer la recolecta, con mejores cotizaciones para quienes han optado por la campaña temprana para la práctica totalidad de los productos.

Por el contrario, los que se han decantado por los cultivos de primavera se han visto afectados por «crisis de precios en cultivos como el calabacín, fundamentalmente, y de melón y sandía», que ya dejan unas pérdidas estimadas de 75 millones de euros, según sus cifras.

En líneas generales, el campo almeriense continúa la tendencia al crecimiento en superficie al superarse ya las 32.000 hectáreas de cultivo, con un 1,2% más de terreno, toda vez que la superficie en producción ha aumentado hasta las 50.154 hectáreas, un 2% más.

Asimismo, la producción general ha alcanzado los 3,96 millones de toneladas, lo que es un 9,3% más que en la campaña anterior, toda vez que el valor de producción habría alcanzado los 2.232 millones de euros, es decir, un 5,6% más. Este incremento en el valor de la producción va en consonancia con el aumento de la producción, ya que «el precio medio de la campaña se mantiene igual que la anterior».

El pimiento, producto líder

Para Asaja, el pimiento es el «líder» del campo almeriense en cuanto a su volumen de producción, si bien aumenta en todos los parámetros, ya sea superficie, precio y valor de la producción, toda vez que ha ofrecido una «mayor estabilidad que el resto de productos».

Con 12,379 hectáreas de cultivo (un 5,2% más) y una producción de 990.320 toneladas (5,5%) su valor en el marcado ha dejado 831 millones de euros, un 13% por encima de la campaña pasada. El tipo que más se ha valorizado respecto a la campaña anterior es el California Rojo, un 13%, mientras que el tipo Italiano pierde un 3% de valor de valor.

El calabacín, por su parte, ha experimentado un incremento en el valor de producción más acusado, con un 50% más hasta los 390 millones de euros -la tercera cifra más destacada por producto- si bien su volumen también ha aumentado de cara a esta campaña un 45% hasta las 696.490 toneladas con una crecida del 2% en las hectáreas de cosecha, hasta las 8.194.

Desde Asaja han señalado que el calabacín se ha convertido en un «producto refugio» ante la crisis de rentabilidad, si bien el incremento productivo está «desestabilizando» sus marcas, de tal modo que la campaña de primavera ha sido la peor en los últimos nueve años, con precios «26% por debajo de la media y un 42% inferior» a los de la pasada campaña.

Por el contrario, la sandía con una superficie de producción de 10.777 hectáreas -la segunda más importante- ha tenido un peor rendimiento y ha dejado un valor de producción de 113 millones de euros, esto es un 47% menos que la pasada primavera, toda vez que su producción ha crecido un 10,4% hasta obtener 538.850 toneladas.