Andalucía

En 2018 se suicidaron en España 2.600 hombres y 900 mujeres: Andalucía, la comunidad más afectada

En 2018, último año del que hay dato publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se suicidaron en España un total de 3.539 personas, siendo 2.619 hombres y 920 mujeres. De este modo, el suicidio sigue siendo la primera causa de muerte externa en el país, y Andalucía se sitúa como la comunidad más afectada por número de suicidios, con una tasa de 7,69 por 100.000 habitantes, superior a la media estatal (7,25).

Dentro de Andalucía, la provincia de Málaga también tiene una tasa superior a la media andaluza y nacional, con 7,90 casos por cada 100.000 habitantes. Por ello, la Diputación de Málaga ha impulsado la puesta en marcha de un proyecto para prevenir el suicidio en municipios menores de 20.000 habitantes.

Se trata de una iniciativa que llevará a cabo la Asociación Justalegría y que se centra en tres ejes: el asesoramiento y la orientación a las personas involucradas en un caso de conducta suicida, la formación de los profesionales de los Servicios Sociales Comunitarios y la sensibilización de la ciudadanía sobre el fenómeno del suicidio, que continúa siendo un tabú social.

El diputado de Mayores, Tercer Sector y Cooperación Internacional, Francisco José Martín, ha presentado en rueda de prensa este proyecto junto a Jesús Criado, director de la Asociación Justalegría; María Montero, psicóloga sanitaria, responsable del servicio de orientación y asesoramiento y Ana Paneque, de la empresa colaboradora ‘Dejando tu huella’ y responsable de las actividades de sensibilización.

Martín ha destacado la trayectoria y la labor que desarrolla Justalegría , una organización malagueña que trabaja en proyectos internacionales de cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria y en proyectos locales de educación para el desarrollo y acción social. Entre estos últimos, desde 2013 desarrolla el programa ‘Razones para vivir’, orientado a la prevención de la conducta suicida.

El diputado provincial ha indicado que en el marco de este programa se van a extender a la provincia las actuaciones que lleva a cabo esta asociación sobre este tema: «Uno de nuestros objetivos es la detección de la población vulnerable y su derivación hacia los canales adecuados; de ahí la importancia de capacitar a los profesionales de los Servicios Sociales Comunitarios, que son los que están en primer línea para la valoración de las necesidades, la planificación, la intervención, el tratamiento y el seguimiento de las personas vulnerables».

Martín ha incidido en la importancia de mejorar el estado de salud mental de los afectados y de concienciar a la población de la posibilidad de prevención de la conducta suicida, un fenómeno que puede verse agravado por los efectos de la pandemia.

Líneas

El proyecto contempla tres líneas de actuación principales. Por un lado, Montero ha indicado que se ofrecerá asesoramiento y orientación a personas con conducta suicida, personas de su círculo cercano o profesionales del sector social que medien en casos de conducta suicida en los municipios menores de 20.000 habitantes de la provincia. También se realizará terapia grupal, sobre fortalezas personales, basada en psicología positiva.

Por otra parte, se ofrecerá formación en prevención de la conducta suicida en los Servicios Sociales Comunitarios. Con ello, se pretende proveer a los profesionales de dichos servicios de las herramientas básicas para valorar y gestionar las necesidades concernientes a la conducta suicida, así como disponer de diferentes alternativas a la hora de facilitar la atención necesaria en caso de demoras o dificultades de acceso a los servicios sanitarios públicos.

Por último, Paneque ha explicado que se realizará una labor de sensibilización a la población general sobre la conducta suicida y la posibilidad de prevenirla, centrándose y apoyándose en el tejido asociativo local y en los responsables de las áreas de Igualdad, Bienestar Social y Tercera Edad de los municipios, para los que se desarrollarán jornadas de sensibilización específicas.

Se entiende básico el trabajo de sensibilización de la población general, ya que la conducta suicida no solo es un tabú sino que, en la mayoría de los casos, conlleva un estigma social que dificulta o incluso impide la búsqueda de ayuda por parte de las personas afectadas, han precisado durante la rueda de prensa.

En este sentido, Paneque ha subrayado que una de las actividades será ‘Caminando por la vida’, que se desarrollará entre el 20 y el 30 de mayo, un evento de sensibilización para dar mayor visibilidad y romper el tabú del suicidio a través del senderismo -con rutas de la Gran Senda y la Senda Litoral- y de los beneficios que reporta para la salud mental.