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Ni Positano ni Santorini: los turistas adoran este pueblo andaluz de casas blancas

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Mojácar es uno de los pueblos más encantadores de la costa levantina almeriense, ideal para disfrutar de unas vacaciones de verano en familia. Su principal atractivo turístico radica en su arquitectura popular de casas blancas, sus playas y su paisaje pintoresco. Este pueblo se despliega sobre una colina en la Sierra Cabrera, conservando una marcada huella árabe. ¡

Entre los tesoros artísticos de Mojácar se encuentra la iglesia renacentista de Santa María, cuyo origen se remonta a los siglos XVI y XIX; el castillo de Mojácar, del siglo XV; y la Puerta de la Ciudad junto al torreón, los únicos restos de la antigua muralla. A los pies del pueblo se extienden más de cinco kilómetros de playas que te dejarán sin aliento.

Mojácar, uno de los pueblos más bonitos de Andalucía

La Plaza del Parterre, uno de los vestigios más claros de la presencia musulmana en Mojácar, es también uno de los lugares más encantadores del municipio almeriense. Este espacio porticado, situado justo al lado la iglesia, ha sido identificado por los arqueólogos como una antigua necrópolis musulmana. Los sepulcros encontrados en el subsuelo están orientados hacia el este, en dirección a La Meca, lo que confirma su origen islámico.

La Iglesia de Santa María, construida a finales del siglo XVI sobre los restos de una antigua mezquita, destaca por su austera arquitectura. Su fachada, un sólido muro de mampostería con escasos vanos, refleja su doble propósito: además de ser un lugar de culto, desempeñó un papel crucial en las defensas de la ciudad.

El barrio del Arrabal, conocido como el antiguo barrio judío de Mojácar, fue construido en el siglo XVII fuera de las murallas de la ciudad. Al cruzar la puerta de la ciudad, se accede a esta judería que formaba parte de la antigua Muxacra árabe. Este arrabal judío, situado extramuros, fue el punto de partida para la expansión de Mojácar.

Caracterizado por sus calles estrechas y sinuosas, el barrio del Arrabal es un lugar de serenidad y luminosidad, con casas blancas y flores de colores que adornan las paredes. Aunque no está completamente confirmado, se cree que la comunidad judía ya residía aquí antes de la llegada de los musulmanes.

La Plaza Nueva de Mojácar es un punto de encuentro central para los habitantes y visitantes, con numerosos bares y restaurante donde probar los platos más típicos de la región. Este espacio es muy popular entre los turistas, especialmente por su impresionante mirador que ofrece vistas al valle de las Pirámides y a las sierras de Bédar, Almagrera y Cabrera.

Desde este mirador, también se puede ver Mojácar la Vieja, el asentamiento original de la localidad, bañado por el río Aguas. La Plaza Nueva es especialmente agradable en las tardes y noches de primavera y verano, así como al mediodía durante el resto del año.

La Casa de la Canana, con más de 200 metros cuadrados de espacio para recorrer, ofrece una experiencia única para adentrarse en la vida rural andaluza de la primera mitad del siglo XX. Esta casa perteneció a la Canana, un personaje notable de Mojácar, conocido por vender productos básicos y tabaco.

La Torre de Macenas es una de las numerosas torres de vigilancia que se encuentran a lo largo de la costa mediterránea. Construida a finales del siglo XVIII, esta torre es un ejemplo destacado de la arquitectura defensiva de la época.

Uno de los lugares imperdibles en Mojácar es su animado paseo marítimo, especialmente vibrante durante el verano. Este paseo, de algo más de tres kilómetros, se extiende paralelo a la costa y está bordeado de palmeras. A lo largo del paseo, se encuentran numerosos chiringuitos,  restaurante, supermercados y tiendas de souvenirs.

Playas

Mojácar tiene un total de 17 kilómetros de costa que albergan una variedad de playas atractivas y únicas. Entre ellas, destaca la Cala de Granatilla, situado dentro de un espacio protegido que requiere especial cuidado por parte de los bañistas. Este enclave combina arena con rocas volcánicas, creando un paisaje virgen y de gran belleza.

La Playa de Venta del Bancal, la primera que se encuentra al llegar desde Carboneras, debe su nombre a una antigua venta que existía en la zona. Esta playa marca el inicio del paseo marítimo que recorre gran parte del litoral de Mojácar.

La playa más popular de Mojácar, situada en plena zona urbana, es El Cantal. Con una longitud de casi 800 metros, ofrece una amplia gama de servicios, incluyendo socorristas en verano y accesos para personas con movilidad reducida.

Otra playa destacada es Marina de la Torre, situada cerca del municipio de Garrucha. Esta playa semiurbana se extiende por casi dos kilómetros y cuenta con arena de grano medio y aguas cristalinas. Los visitantes pueden disfrutar de una variedad de servicios.

¿Te animas a disfrutar de unas vacaciones en familia en este precioso pueblo de la costa andaluza?