La emotiva imagen en la que unos abuelos conocen a su nieta a través de la ventanilla

Nacer en tiempos de coronavirus no es tarea sencilla. A los nervios del parto se le suma la más absoluta soledad. Sin familiares que puedan venir al hospital en unos momentos tan especiales, los bebés siguen llegando a este mundo. Es el caso de la pequeña India y de su mamá Sara, las dos se conocieron en un hospital donde el coronavirus era el protagonista. Descubrieron en medio de ese caos el amor más puro que existe en este mundo, el de una madre al ver a su hija.

Sara quería que sus padres conocieran a su nieta a través de la ventanilla del coche

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A ti mamá Me perdonarás que no te llamara para decirte “mamá nos vamos al hospital, estoy de parto!!!”. Sabía que de haberlo hecho te hubieses pasado la noche en vela, dándole mil vueltas a la cabeza y sufriendo por la situación que podríamos estar viviendo en el hospital con la que está cayendo, y conociéndote, seguro que muerta del miedo por nosotras. Perdóname, pero quería evitarte ese mal trago. Mamá India llegó al mundo rodeada de amor, pero no hubo visitas, no hubo globos ni bombones, no pudiste sentarte a los pies de mi cama para hablar sobre cómo había ido, no tuve tu abrazo, ni ella tuvo tu beso. Me moría de ganas de explicarte que conseguimos ese parto natural que tanto soñaba, quería explicártelo todo, quería que te sintieras orgullosa de mi, tantas veces que te había preguntado, mamá tanto duele? Y siempre me respondias lo mismo, “mucho, pero ese dolor se olvida”, y ahora que por fin se lo que tú sentiste, no puedo compartirlo contigo como me gustaría. No has podido tener la foto de esa primera vez con tu nieta en brazos, sigues sin saber cómo de suave es su piel, ni a que huele, créeme mamá, esta niña es de terciopelo. Este virus nos ha robado muchos momentos, por ello quise daros esta sorpresa a la salida del hospital camino a casa. Quise que al menos pudierais conocerla dos minutos, me conformaba con bajarais a vuestra portería y mostraros a vuestra nieta detrás de esas mascarillas y a través de una ventana sin poder tocarla. No puedo veros las caras, pero se que papá y tu estáis sonriendo, no sois capaces de hablar sin tragar saliva, y las lágrimas en los ojos os delatan. Nunca en la vida me hubiese imaginado que sería así, nunca en la vida pensé que algo tan frío pudiera llegar a ser tan sumamente íntimo y cercano, he aprendido que los besos y los abrazos también pueden darse a través de la mirada. Mamá ese abrazo llegará, y todo lo que estamos viviendo nos servirá para valorarlo mucho más, llegará ese beso, esa caricia y podremos llenar nuestra caja de recuerdos de todas esas primeras veces, solo tenemos que esperar un poquito más. . . . #nacerenpandemia #covid #partonatural #parirenpandemia #mama #abuela #debalconabalcon

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Sara es una madre que se ha convertido en el símbolo de todas las que dan a luz durante esta época. En pleno confinamiento sabía que pasaría por el momento del parto sola, no pudo llamar a sus padres, ni esperar sus consejos. Se fue al hospital y pasó por este proceso con su amor con bandera y el objetivo de abrazar por primera vez a la pequeña India.

La bebé llegó al mundo sana, deseando descubrir un poco más de su familia. El calor de su madre fue lo primero que se encontró en un hospital frío. Sara estaba feliz de poder estar por fin con su pequeña, pero le faltaba algo, su familia. No había nadie que la esperará en la habitación o que sintiera la misma emoción que ella. Sus padres no estaban, pero no quería dejarles sin la posibilidad de conocer a su nieta.

Llegó el momento de salir del hospital, la nueva familia tenía claro donde ir, a casa de los abuelos. Sin poner en peligro a nadie, los abuelos debidamente equipados pudieron ver a su nieta por la ventanilla del coche. Sara y su bebé saben que los abuelos están emocionados detrás de esa mascarilla y aunque no la puedan abrazar de momento, sienten también su calor. El amor que nace de esos sentimientos increíbles que provoca la llegada de un recién nacido se percibe en esta foto.