Tecnología

La tecnología 3D ya es capaz de sustituir cartílago en las articulaciones

La rodilla suele ser una de las partes del cuerpo cuyos problemas cuesta resolver. La cirugía puede ayudar a sobrellevar el dolor o las inflamaciones, pero no solucionan al 100% algunas de las patologías. Por ello, porque se presentaba como un reto, se ha elegido un menisco para hacer pruebas con tecnología de impresión en 3D.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Columbia (EEUU) ha realizado en el centro médico de esa institución educativa un importante avance en este campo. Se trata de un menisco imprimido en una impresora 3D.

La manera de hacerlo y alcanzar ese resultado es a través de una resonancia magnética que ofrece una imagen que luego es tratada para transformarla en tres dimensiones. De ahí se envía la información a la impresora, que hace su trabajo e imprime en 3D una pieza exacta a la del paciente.

El menisco desgarrado es uno de los diversos problemas que se pueden encontrar en una rodilla, por lo que el material con el que ha sido imprimido este menisco en 3D permite que se vaya regenerando por sí mismo. Se trata de la policaprolactona, también conocido como polímero biodegradable y su uso no es novedoso en el campo de la medicina, pues ya se usa para realizar suturas quirúrgicas.

Ese polímero se enriquece con proteínas humanas para favorecer así la regeneración del menisco interior y exterior, pues ellas están relacionadas con el crecimiento y son capaces de atraer a las células madre propias del cuerpo para generar el mismo.

Hay que establecer que, en un primer momento, se han llevado a término diversas pruebas con ovejas y han resultado exitosas pues la reproducción del menisco ha sido exacta. Tanto es así que los animales a los que se les implantó esta novedosa tecnología 3D en sus rodillas  volvieron a caminar con total normalidad a los tres meses.