Sociedad

Máximo esfuerzo e implicación para preservar la salud y seguridad en residencias

Nos encontramos en un momento histórico que, casi con toda seguridad, nos ha marcado a todos en mayor o menor medida, razón por la que probablemente será difícil de olvidar. Hemos tenido que estar confinados varios meses y, tras un breve tiempo de respiro, las cifras de contagios vuelven a ponernos en alerta.

Uno de los colectivos más vulnerables en esta situación es el de nuestros mayores. El Ministerio de Sanidad, así como los correspondientes organismos de salud de cada Comunidad Autónoma, publican periódicamente los protocolos a seguir en las residencias: cómo deben gestionarse las visitas, cómo comunicar un caso positivo a Salud Pública, etc.

En este sentido, Clece, la filial de ACS que gestiona 62 residencias de manera integral en toda España, cumple de manera escrupulosa estos protocolos. Pero además, como ocurrió durante la pandemia, la compañía ha definido una serie de medidas adicionales cuyo objetivo no es otro que el de preservar la salud y la seguridad de usuarios y de trabajadores tratando de evitar de este modo la entrada del virus en sus centros.

Se han llevado a cabo técnicas de limpieza hospitalaria para obtener el máximo nivel de limpieza y desinfección. Para ello, Clece cuenta con la tecnología más avanzada para este fin: luminómetros, cañones de ozono y el robot de desinfección por luz de xenón pulsada LightStrike™ Xenex, con tecnología de desinfección de luz ultravioleta (UVC) que descompone los microornagismos y logra la destrucción del SARS-CoV-2, que causa el Covid-19 hasta en un 99,99%.

Por otro lado, cabe destacar la organización de las unidades de convivencia según la situación inmunológica de los residentes, habilitación de zonas de desinfección, así como el mantenimiento de un stock mínimo  de seguridad de materiales higiénico sanitarios y de EPI para un mínimo de 3 meses. Adicionalmente, además, el suministro de mascarillas está garantizado gracias a una máquina de fabricación de mascarillas que Clece ha adquirido recientemente y que es capaz de producir diariamente 55.000 mascarillas quirúrgicas tipo II.

En algunas residencias incluso se están ofreciendo mascarillas gratuitas a los visitantes para garantizar aún más la protección de los usuarios, asegurando así que son las adecuadas, que no tienen  un exceso de horas de uso y están homologadas apropiadamente. Para agilizar este proceso se ha adquirido en algunos casos máquinas expendedoras de mascarillas que, de momento, está funcionando en pruebas para comprobar su eficacia.

Además, en algunos centros también se han empezado a restringir las visitas de los familiares a raíz de los rebrotes surgidos. Por ello, aquellos que vayan a acceder a las instalaciones deben someterse a pruebas de test rápidos en algunos centros, así como al reconocimiento facial y medición de temperatura o la firma de una carta de responsabilidad que confirmen no padecer la enfermedad. En muchas de las residencias también se ofrece a las visitas la realización de test rápidos para mayor seguridad de los residentes, ya que en caso de que aparezca un positivo, no podrá acceder a las instalaciones para preservar la seguridad de los usuarios.

La restricción de visitas se ve mitigada por el contacto audiovisual con las familias a través de tabletas electrónicas para que los usuarios sigan en contacto con sus seres queridos. En Clece se le da mucha importancia a la cercanía de los familiares con los usuarios de las residencias por el efecto tan beneficioso que tiene sobre ellos y en todo momento se aboga por que la implicación de los familiares en todo lo que rodea al usuario en el centro sea la máxima.

Adicionalmente Clece ha adquirido varias máquinas para poder realizar pruebas PCR a usuarios y trabajadores, siempre por parte de personal sanitario. Esto no sustituye a las pruebas realizas por el sistema de Salud Pública, pero sí ayuda a detectar el virus con antelación ya que los resultados se obtienen en 20 minutos, aunque siempre son corroborados por la prueba del centro sanitario correspondiente.

Cabe destacar, además, la puesta en marcha de simulacros de contagio de coronavirus en las residencias gestionadas por Clece con el fin de saber cómo actuar y hacerlo en el menor tiempo posible en caso de que aparezca un caso positivo. Los resultados están siendo muy satisfactorios y se han extraído mejoras de estas actuaciones.

Son muchas las medidas que  se han implantado en las residencias que gestiona Clece con el objetivo de preservar la seguridad y salud de usuarios y trabajadores, algo que, sin duda, es su máxima prioridad.