Sociedad

Conductores reincidentes por alcohol y drogas perderán el carné y un médico ratificará su incapacidad para conducir

Los conductores reincidentes en alcohol y drogas, es decir, los que hayan cometido dos o más infracciones de este tipo en menos de dos años, serán remitidos a las autoridades sanitarias para que evalúen si tienen un problema de abuso o dependencia de esas sustancias antes de recuperar la vigencia de su carné.

Esta es una de las medidas que el Ministerio del Interior, a través de la Dirección General de Tráfico (DGT), reforzará y aplicará de forma prioritaria y contundente junto a otras para evitar, como ha ocurrido recientemente, accidentes mortales causados por conductores que se habían puesto al volante tras consumir alcohol o drogas.

Ha sido el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, quien ha explicado esta y otras medidas en la reunión que ha presidido del Comité de Seguridad Vial, que hoy las analiza en una jornada de trabajo tras varios atropellos a ciclistas por conductores ebrios.

Zoido ha dicho que si se estima que los reincidentes -a quienes se les aplicará la pérdida del carné, como prevé la ley- pueden tener un problema de abuso o adicción a esas sustancias, deben ser tratados y evaluados por la autoridad sanitaria conforme prevé el Reglamento General de Conductores, que en este aspecto se ha aplicado en muy pocas ocasiones.

Y a esta medida Zoido ha añadido una más que ha considerado relevante: se abrirán procedimientos sancionadores por infracción a la normativa de tráfico si después de haber habido un accidente, el juez archiva las actuaciones en la vía penal.

Si hay posibilidad de continuar con la vía sancionadora administrativa, se hará para que el conductor infractor no quede impune.

Zoido se ha dirigido a los miembros del Comité para recordarles que el Ministerio ha sido muy sensible desde el principio de la legislatura a la accidentalidad dentro del colectivo de ciclistas y, de hecho, ya se han señalizado 56 rutas seguras para estos usuarios de la vía, mientras que otras están pendientes de señalización.

Su objetivo es facilitar y proteger el tránsito de ciclistas por las carreteras convencionales y reducir la accidentalidad, por lo que las señales informan de periodos, tramos y rutas con elevada intensidad circulatoria de ciclistas, además de limitar la velocidad.

Medidas a las que Zoido ha unido otras como una mayor presencia de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en las vías secundarias donde hay más ciclistas los fines de semana, o el aumento de los controles de alcohol y drogas en las mañanas de los sábados y domingos.

Zoido ha precisado que se pretende incrementar en 100.000 los de alcohol y en 30.000 los de drogas.

Todo ello dentro de un plan especial de vigilancia con medios aéreos y terrestres que también incluye la identificación de las vías más frecuentadas por los ciclistas.

El titular de Interior ha explicado también otras actuaciones previstas, como la realización de un estudio en profundidad de los accidentes de los últimos años en los que se han visto implicados ciclistas, con las principales causas, tipologías, tramos más peligrosos, etc…

Con ello, ha subrayado Zoido, se puede contribuir a salvar más vidas.

Más campañas preventivas para dar a conocer, sobre todo a los conductores, de la normativa que afecta a los ciclistas, es otra de las medidas que estudia el Comité y que complementarán a otras ya en marcha como la de «Almas ciclistas», donde se reproducen las últimas rutas de personas que murieron cuando montaban en esta medio.

Según Zoido, se está trabajando en otra campaña de concienciación basada en testimonios reales de personas que han sufrido accidentes o de sus familiares, que se emitirá antes de verano en radios y televisiones. Además, se fomentará el uso de los paneles de mensaje variable para incluir algunos referidos a los ciclistas.

Así, los sábados y domingos por la mañana, que son las jornadas con mayor tránsito de bicicletas en las carreteras, se insertarán en los paneles mensajes para que los conductores sepan, por ejemplo, que deben dejar 1,5 metros de distancia para adelantar a una bici, que se puede rebasar la línea continua en ese caso o que los ciclistas pueden circular en paralelo.

También se potenciará el uso de la aplicación de la DGT Comobity, que avisa con antelación al resto de los usuarios de la presencia de ciclistas en su recorrido. ya hay más de 21.000 usuarios y 58.000 avisos, según ha resaltado el ministro, quien ha valorado las bondades de este sistema.

Un total de 58 ciclistas fallecieron en 2015, último año cerrado en datos de siniestralidad, 17 menos que en 2014.

En cuanto a lo que va de año, solo se tiene datos de las carreteras interurbanas, donde han perdido la vida 18 ciclistas, 3 más que a la misma fecha del año pasado.