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‘Juego de Tronos’: Resumen rápido y sencillo de la cuarta temporada

Seguimos resumiendo las temporadas de ‘Juego de Tronos’ a la espera del estreno de la octava y última. En esta cuarta temporada, la que nos ocupa en estas líneas, no podemos empezar hablando por otra cosa que no sea la muerte de Joffrey en el segundo episodio, pues impactó y gustó a partes iguales. Joffrey muere en su propia boda, la que le estaba uniendo a Margaery Tyrell.

Sansa escapa de Desembarco del Rey cuando el caos y la confusión reinan en la boda, con ayuda de Dontos el Rojo (el bufón al que salvó en la segunda temporada) y Meñique, que no ha olvidado sus pretensiones con Sansa. Juntos van al Nido de Águilas, donde les espera Lysa, tía de Sansa y ahora esposa de Meñique. En esta temporada descubrimos que en realidad fue Lysa quien asesinó a Jon Arryn, antigua Mano de Robert Baratheon y la razón por la que Ned Stark fue a Desembarco. Lysa, que lleva amando a Meñique desde que era una niña, enloquece de celos por Sansa y al final Meñique decide asesinarla, días después de su boda. Los vasallos de Lysa piden explicaciones, pero Sansa miente por Meñique y les permiten quedarse en Nido de Águilas, Meñique como regente hasta que Robin Arryn cumpla la mayoría de edad.

Sansa deja en Desembarco a Tyrion Lannister, con quien ya está casada. Es a él a quien acusan de haber matado a Joffrey, pues estaba siendo su copero en la boda. Se celebra un juicio y Jaime, sabiendo que sería condenado, le pide a su padre, Tywin, que lo declare inocente, y a cambio él se convertirá en el heredero de los Lannister, con todo lo que eso significa -dejar la capital y encontrar una esposa, entre otras cosas. Tywin accede, pero cuando el juicio está a punto de terminar aparece Shae como testigo, que declara en contra de Tyrion. Nuestro protagonista estalla, consciente de que está todo manipulado en su contra, y exige un juicio por combate.

Oberyn Martell será su representante en el mismo, pues lo único que busca el príncipe de Dorne es venganza por la muerte de su hermana, Elia, y sus sobrinos, a manos de la Montaña. Oberyn es un experimentado guerrero y está cerca de vencer a la Montaña, el campeón que elige Cersei, pero finalmente… Bueno, todos sabéis lo que pasa.

Pero Jaime libera a Tyrion antes de que puedan ejecutarlo, en una de las escenas más significativas de ‘Juego de Tronos’. Lo hace con ayuda de Varys. Tyrion, sin embargo, no puede evitar marcharse y dejarlo todo como está: busca a su padre antes de dejar la capital. En su cama encuentra a Shae, a quien ahoga con lágrimas en los ojos. Su padre, Tywin, corre un destino similar: lo asesina mientras se encuentra en el baño, en otra gran escena. Tras esto se marcha al otro lado del mar Angosto, acompañado de Varys.

Jaime tiene una gran evolución en esta temporada. Aunque sigue enamorado de Cersei, que sigue enfadada con todos y con todo, y dolida por la muerte de su hijo Joffrey, empieza a plantarle cara. Practica con Bronn un mejor manejo de la espada con su mano izquierda, y busca cumplir la promesa que le hizo a Catelyn Stark: acuerda con Brienne, a quien le entrega una espada hecha exclusivamente para él -a partir de la de Ned Stark-, que debe encontrar a las pequeñas Stark y protegerlas.

Arya pasa está temporada con el Perro, que intenta llevarla a Nido de Águilas solo para descubrir que su tía ha muerto y sin saber en ningún caso que su hermana Sansa se encuentra allí. Brienne encuentra a la joven Stark, pero tanto Arya como el Perro recelan de sus intenciones (al fin y al cabo, lleva una espada Lannister) y tras una gran batalla, el Perro cae. Arya le deja vivir, o más bien le deja morir, y se marcha. A Braavos, en busca de Jaqen H’ghar.

Los Tyrell siguen en la corte. Tras la muerte de Joffrey, es Tommen, el pequeño de los Lannister, quien es coronado Rey. Olenna Tyrell le advierte a Margaery que debe engatusar al pequeño antes de que Cersei se lo lleve a su terreno y así lo hace Margaery, que ante todo quiere ser reina.

Stannis sigue queriendo ser Rey, y sigue teniendo a Melissandre de su lado pero empieza a moverse por otro lado. Junto a ser Davos (¡qué gran personaje!) acuden a Braavos, a pedir ayuda al Banco de Hierro. Consiguen barcos, y consiguen seguir moviéndose hasta el final de temporada, cuando llegan al Norte dispuestos a empezar su conquista por ahí.

En el Norte, Theon sigue siendo la marioneta de Ramsay, que ya es un Bolton por decreto real. Yara, su propia hermana, intenta liberarlo sin éxito, pues Theon se niega a dejar a su amo. Roose Bolton vuelve casado con una Frey y siendo Guardián del Norte. Las tierras más amplias de los Siete Reinos les pertenecen.

No les pertenece el Muro, donde las cosas se complican. Jon regresa con sus hermanos de la Guardia, y deciden que deben abordar a los amotinados que siguen en el Torreón de Craster para que los salvajes, en su camino al Muro, no puedan interrogarlos. Se da una gran batalla entre Hermanos, aunque no tiene nada que ver con la que vemos en el noveno episodio: la Guardia de la Noche contra los salvajes. Ygritte, por cierto, muere en este capítulo, en brazos de Jon.

Tras la batalla, Jon va a visitar a Mance Rayder, su líder, porque quiere ofrecerle un trato. Cuál es su sorpresa, y la nuestra, cuando llega Stannis, declarándose rey, ayudando a la Guardia de la Noche y capturando a Mance. Los salvajes, tras esta emboscada, huyen hacia el Norte.

Donde se encuentra Bran, que sigue en busca del Cuervo de Tres Ojos. Sus visiones son cada vez más reales y más duraderas, y viaja entre el pasado ¿y el futuro? En esta búsqueda, Jojen muere, pero él sabe que ese era su destino: conducir a Bran al suyo. Así es como llegan hasta los Niños del Bosque.

Por último, Daenerys Targaryen. Con sus grandes ejércitos, llegan a Meereen y liberan a la ciudad del comercio de esclavos. Daenerys establece en Meereen su lugar de residencia, pues son muchas las cosas que debe arreglar en la gran ciudad. El gobierno no es fácil, sus dragones empiezan a crecer y matar indiscriminadamente y tiene que encerrarlos, y además descubre que Jorah fue un espía del Rey Robert durante sus primeros encuentros, así que lo exilia. Daenerys empieza a vivir como una verdadera reina, con todo lo que eso conlleva.