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Salud ocular

Orzuelos, qué son y cómo tratarlos

Es una inflamación purulenta de las glándulas oculares que suele ser causada por una infección bacteriana

Una correcta higiene y los hábitos saludables son la mejor manera de prevenirlos

Muchos problemas oculares requieren el tratamiento médico de un oftalmólogo. pero hay algunos que pueden ser tratados en casa de una manera segura, siempre y cuando sean simples, como es el caso de un orzuelo.

Se trata de una inflamación purulenta que se manifiesta en por un absceso en forma de grano en el párpado. De ahí viene su nombre en latín, hordeum, que significa «cebada». Suele ser un nódulo rojizo y doloroso pero en algunas ocasiones hace que se inflame todo el párpado y se obstaculice la visión.

En los párpados tenemos glándulas que fabrican una secreción aceitosa necesaria para el correcto funcionamiento de la superficie ocular. Cuando una de estas glándulas se infecta, se produce el orzuelo. Pero también se pueden producir por una infección de un folículo piloso de las pestañas. En función de dónde se encuentre, existen dos tipos de orzuelos:

Según la Asociación Americana de Oftanmología, (AAO) estos son algunos de los síntomas habituales de un orzuelo:

Tratamiento del orzuelo

Es posible curar un orzuelo en casa si no se presentan complicaciones. Según El Instituto Catalán de Oftamología (ICR), la mayoría de los orzuelos desaparecen solos sin necesidad de un tratamiento específico.
Se aconseja la aplicación de compresas de agua tibia sobre el párpado afectado durante 5-10 minutos, unas 3 o 4 veces al día, realizando un suave masaje para favorecer el drenaje de la glándula obstruida. haciendo esto, en una o dos semanas habrá desaparecido.

Pero si pasadas 48 horas, la inflamación o el enrojecimiento empeoran, hay que consultar a un oftalmólogo que deberá valorar la necesidad de emplear un tratamiento antibiótico, aplicar inyecciones de esteroides para disminuir la hinchazón o hacer uso de la cirugía para drenar el orzuelo en el caso de que se complique y se enquiste.

La cirugía del orzuelo enquistado es muy sencilla y casi indolora: se trata de extirparlo quirúrgicamente. Este procedimiento se lleva a cabo de forma ambulatoria, con anestesia local y no se realizan puntos de sutura. Basta con extirparlo.

Mientras se sufre el orzuelo hay que mantener el ojo limpio con suero o jabones específicos, no utilizar maquillaje ni lentes de contacto.
Para aliviar el dolor y la sensación de picor, se puede aplicar una toallita mojada con agua tibia, bien escurrida y colocarla sobre el ojo cerrado hasta que la toallita se enfríe. Para notar el efecto hay que repetir el proceso varias veces.

Tradicionalmente, se recurre a una infusión de manzanilla debido a sus propiedades calmantes pero hay que tener en cuenta que no es una solución estéril como puede ser un suero.
Prevención

La mejor manera de prevenirlos es mantener una higiene correcta para evitar que las glándulas se infecten. Esto se logra a través de algunas medidas de higiene básicas y hábitos saludables para los ojos: