El Clínico San Carlos lidera un tratamiento que reduce la progresión de la miopía en niños y jóvenes
Se trata de un ensayo clínico pionero basado en un tratamiento combinado con colirio de atropina diluida y lentes con un diseño óptico específico para el control de la miopía
Fact checked
Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.
El Hospital Clínico San Carlos, perteneciente a la red sanitaria pública de la Comunidad de Madrid, lidera un ensayo clínico pionero basado en un tratamiento combinado con colirio de atropina diluida y lentes (gafas) con un diseño óptico específico para el control de la miopía que ha mostrado una disminución de la velocidad de progresión de esta patología en niños y adolescentes, según los resultados preliminares obtenidos por los especialistas de la Unidad de Oftalmología Pediátrica y Motilidad Ocular de este centro madrileño.
Se trata del primer ensayo clínico aleatorizado que evalúa y compara la eficacia del tratamiento combinado de atropina diluida al 0,025% y la utilización de gafas con lentes oftálmicas de tecnología DIMS -que permite mantener una visión nítida en el centro de la lente y un desenfoque periférico que controla la progresión de la miopía, evitando el alargamiento axial del ojo-, frente al tratamiento con colirio de atropina al 0,025% y lentes convencionales.
Este estudio, avalado por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, cuenta con la participación de niños de entre 4 y 16 años de edad, con miopía entre 1 y 6 dioptrías y hasta 2 dioptrías de astigmatismo. El objetivo de este estudio es frenar la progresión de la miopía, «y lo que es más importante, disminuir la velocidad de crecimiento del ojo (longitud axial), ya que el aumento del crecimiento ocular o elongación axial, se asocia con un aumento del riesgo de desarrollar enfermedades oculares asociadas a la miopía, y que pueden causar un déficit visual irreversible en la vida adulta, como desprendimiento de retina, cataratas o maculopatía», explica la oftalmóloga del Hospital Clínico San Carlos, Noemí Güemes.
«Los hallazgos de este trabajo han mostrado que el tratamiento combinado disminuye de manera significativa el aumento miópico de la longitud axial y, además, se ha visto que aproximadamente casi 4 de cada 10 pacientes han conseguido detener la progresión axial miópica con el tratamiento combinado», añade la responsable de la Unidad de Oftalmología Pediátrica y Motilidad Ocular del Hospital Clínico San Carlos, Rosario Gómez de Liaño. Los resultados preliminares de este novedoso estudio ya han sido presentados en congresos nacionales e internaciones.
Control para prevenir patologías oculares
El aumento exponencial de la miopía ha sido considerado como un problema de salud pública global por la Organización Mundial de la Salud, que estima que entre un 40% y un 52% de la población mundial será miope en 2050. Adicionalmente, la miopía, muchas veces banalizada o infravalorada por considerarse un simple defecto refractivo que se corrige con gafas, ha sido clasificada recientemente como una enfermedad por las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina Americanas.
Cada dioptría cuenta «ya que cada dioptría evitada reduce el riesgo en un 40% de padecer patologías asociadas en la edad adulta como desprendimiento de retina, catarata precoz, glaucoma o maculopatía miópica. Por el contrario, el aumento de una dioptría incrementa el riesgo de maculopatía miópica en un 67% de por vida», explica Gómez de Liaño.
Referente en miopía
En opinión de la oftalmóloga del hospital público Clínico San Carlos, Noemí Güemes, «cada vez hay más miopía en edades más tempranas. Estamos viendo en las consultas del hospital que la miopía se está desarrollando y creciendo a una velocidad mayor de la esperada», señala.
La miopía es un defecto refractivo que provoca visión borrosa de lejos, que se asocia habitualmente con una elongación o alargamiento axial del ojo. En su desarrollo influyen aspectos genéticos, como tener padres miopes y, de manera importante, factores medioambientales relacionados con el estilo de vida. Para controlar la progresión de la miopía, los especialistas en oftalmología recomiendan intentar pasar más tiempo al aire libre con luz natural, mantener una distancia de trabajo apropiada (leer a más de 40 centímetros de distancia), disminuir en la medida de lo posible el abuso de pantallas, especialmente con poca luz, y acudir a revisiones médicas periódicas.
Se puede corregir con la utilización de gafas o lentes de contacto y con cirugía refractiva, aunque estas opciones permiten disponer de una visión nítida al corregir las dioptrías, pero no tratan ni modifican la longitud axial del ojo, que es el parámetro relacionado con el desarrollo de enfermedades oculares asociados a la miopía. «Cuanto antes se trate antes se podrá frenar su progresión y evitar patologías asociadas a la miopía alta o magna, que es aquella que se tiene a partir de 6 dioptrías y/o una longitud axial de 26 milímetros», añaden las oftalmólogas.
El Hospital Clínico San Carlos, de la Comunidad de Madrid, cuenta con una unidad de miopía pionera en la sanidad pública española, con amplia experiencia clínica y con un destacado perfil científico e investigador, aglutinando diversos estudios líderes en este campo de la oftalmología.