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Patatas a la navarra

Un buen guisado es la mejor opción para nuestro menú semanal y cargar energías, sobre todo los días más frescos. A continuación, veremos cómo hacer patatas a la navarra. Un plato muy fácil y económico, ideal para dar lo mejor a tu familia. Las patatas a la navarra son un plato típico de esta región, que tiene como ingrediente principal a la chistorra.

La chistorra es un embutido con carne de cerdo, ajo y pimentón. Para quienes no les gusta, este contundente ingrediente se puede reemplazar por chorizo colorado y el resultado será igualmente excelente.

Otro de los ingredientes tradicionales de este plato son los guisantes; este alimento aporta muchos nutrientes, además de color. Es fuente de minerales como el magnesio, el fósforo y el potasio y de vitaminas A, C y B3.

El caldo de verduras puede comprarse hecho o hacerse casero rehogando diferentes vegetales como apio, zanahorias, puerro, tomate, etc. Y luego dando una cocción de unos 45 minutos.

Ingredientes:

Cómo preparar patatas a la navarra:

  1. En primer lugar, lavar, pelar y cortar las patatas. Es conveniente cortarlas en dados de similar tamaño para que se hagan todas de forma homogénea  y evitar que algunas estén listas antes que otras.
  2. Después picar la cebolleta bien fina y los dientes de ajo en trozos pequeñitos.
  3. En una cazuela de barro calentar el aceite de oliva y echar el ajo y la cebolleta. Sofreír las verduras unos minutos hasta que transparenten.
  4. Añadir las patatas en dados y sofreír todos los ingredientes durante dos minutos para que cojan sabor. Luego verter el caldo de verduras; cubrir los ingredientes, agregar una pizca de sal y pimienta y tapar la cazuela.
  5. Cortar la chistorra en trozos y reservar. Transcurridos 10 minutos, incorporar la chistorra y los guisantes.
  6. Dejar cocer durante 10 minutos más o hasta que las patatas estén cocidas. Cuidar que logren el punto justo, evitando que estén demasiado blandas.
  7. Poner a punto de sal.
  8. Apagar el fuego y servir bien caliente con unas hojas de perejil fresco picado. Se puede añadir una pizca de pimentón dulce si apetece.

Siguiendo estos pasos sencillos tienes una receta contundente, sabrosa, económica y energética. No lo pienses y prueba hacerla. Con la llegada de las bajas temperaturas, contar con un plato de estas características es la mejor idea. Anímate y te encantará.