Espinacas con bechamel
Las espinacas con bechamel son una deliciosa opción que tiene como protagonista a uno de los vegetales más apreciados. La capa gratinada que caracteriza este plato le da un toque especial que lo hace irresistible.
Las espinacas contienen minerales como el hierro, el selenio y el yodo. Además, aportan antioxidantes que retrasan el proceso natural de envejecimiento; también protegen a las células sanas y refuerzan el sistema inmune.
Otro aporte de esta interesante verdura es la fibra, importante para el aparato digestivo. Ayuda en el tránsito intestinal, por lo tanto previene enfermedades como el cáncer de colon y la diverticulitis.
Con esta receta que combina las espinacas con salsa bechamel, los niños se animarán a tomar verduras de una forma diferente, más divertida para ellos.
Ingredientes:
Para las espinacas:
- Un manojo grande espinacas
- 1 diente de ajo
- 150 g de piñones
- Aceite de oliva
- 100 g de queso parmesano
- Pan rallado
Para la bechamel:
- ½ L de leche entera
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina
- 1 pizca de nuez moscada
Cómo preparar espinacas con bechamel:
- Lavar bien las espinacas. Separar las hojas de los tallos y reservar las hojas.
- Preparar la bechamel. Poner a calentar una cacerola, derretir la mantequilla y mezclar la harina de trigo utilizando una cuchara de madera. Añadir la leche removiendo constantemente para que no queden grumos.
- Agregar sal y pimienta al gusto. Cuando la salsa bechamel comience a espesar, añadir la nuez moscada y bajar el fuego.
- La bechamel para esta receta debe ser ligera. Si queda demasiado espesa, será difícil cubrir las hojas de las espinacas. En caso de que se ponga muy densa, añadir leche y remover.
- Poner a calentar una sartén con aceite de oliva, Freír los piñones durante un par de minutos y retirar del fuego. Reservar.
- Picar en trozos muy pequeños el diente de ajo. Freírlo con un chorrito de aceite de oliva en la misma sartén en la que se han tostado los piñones.
- Cuando el ajo cambie ligeramente de color, añadir las hojas de espinaca en la sartén. No importa si parece que no caben, pues pasados unos minutos se reduce considerablemente su tamaño. Agregar los piñones fritos.
- Coger una bandeja para horno y pintar el fondo con mantequilla. Distribuir las espinacas y cubrirlas bien con la bechamel, poner una capa de pan rallado y otra de queso parmesano.
- Precalentar el horno a 180º C.
- Por último, introducir la bandeja en el horno y hornear hasta que gratine. Servir.
¿Te gustan las espinacas? Hay muchas formas de prepararlas; no dejes de probar esta deliciosa receta que invita a comer verduras con un delicioso sabor
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