Crujiente de jamón
El crujiente de jamón es una sencilla preparación para volver con esa textura algunas lonchas de jamón y acompañar otras recetas. Es delicioso en ensaladas, pastas, panes o cualquier otra preparación que quiera enriquecerse con su agradable textura.
El jamón serrano es una excelente fuente de vitaminas del grupo B. La vitamina B1, también, llamada tiamina, tiene la función de convertir los alimentos en energía. Por su parte, la vitamina B2 ayuda a regular el metabolismo, pues tiene influencia en las glándulas endocrinas.
La vitamina B3, también llamada niacina, interviene en el funcionamiento del metabolismo, ayuda a producir neurotransmisores y al funcionamiento del sistema nervioso.
Por último, la vitamina B6 colabora en la producción de los anticuerpos que el organismo necesita para defenderse de agentes externos que producen enfermedades.
El jamón serrano también aporta minerales como el hierro. Este mineral es indispensable para la formación de la hemoglobina, encargada de transportar oxígeno a todo el organismo. Es útil para prevenir y tratar la anemia.
También el jamón contiene zinc, otro mineral que ayuda a la protección del sistema inmune, ya que actúa contra las bacterias y virus; igualmente, ayuda a cicatrizar heridas en la piel y en las mucosas.
El jamón serrano, además de los minerales mencionados, contiene fósforo, importante en la formación de los huesos y los dientes. Además, ayuda a que el cuerpo pueda producir la hormona del crecimiento, por lo tanto es un mineral importante en la dieta de niños y adolescentes.
Ingredientes:
Para el crujiente de jamón:
- Lonchas de jamón serrano
- Papel de horno
Para la ensalada:
- 1 paquete de ensalada de lechugas y rúgula
- 150 g de queso pecorino
- 4 fresas
- 1 docena de tomates cherry
- ½ cebolla
- Aderezo de mostaza y miel
Cómo preparar crujiente de jamón:
- Preparar el crujiente de jamón: poner las lonchas de jamón sobre papel para hornear. Cubrirlas y hornear durante 20 minutos a 200ºC.
- Poner el contenido del paquete de ensalada en un bol. Reservar.
- Lavar las fresas y los tomates. Cortar los tomates a la mitad y las fresas en lajas y añadir al bol.
- Cortar la cebolla en julianas finas e incorporar a la ensalada.
- Partir el jamón en trocitos e incorporar al bol.
- Rociar en aderezo de mostaza y miel. Agregar el queso. Mezclar.
- Añadir el jamón partido en trocitos.
Prepara esta deliciosa ensalada con crujiente de jamón que sorprenderá a tus invitados. Es muy fácil de hacer y su acabado y textura son asombrosos.
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