Opinión

La Náusea Infinita

La intervención de EH Bildu en la tribuna del Congreso de los Diputados durante el debate de investidura ha sido una afrenta moral a todos los españoles que creemos en la Constitución y en el Estado Derecho. Con todo, en mi opinión, lo más triste ha sido la negativa de la presidencia a aplicar el Reglamento ante las graves acusaciones formuladas contra la Jefatura del Estado. Sin embargo, no pequemos de ingenuidad: la actuación de la presidenta no es sino reflejo de la estrategia del nuevo Gobierno que, si nada lo remedia, tendremos en pocas horas.

El PSOE es un partido con una historia centenaria y, por tanto, con luces y sombras. Entre sus luces, sin duda, encontramos la apuesta por el establecimiento del régimen constitucional del 78. Y, precisamente, la defensa de nuestra Constitución costó la vida a muchos socialistas, a los cuales, junto con el resto de víctimas del terrorismo, jamás estaremos suficientemente agradecidos. Su valentía y ejemplo nos deben guiar siempre, estemos en la vida pública o privada, y no debemos olvidarles nunca. Su memoria estará siempre entre nosotros.

Pues bien, la defensa de estos valores, de la memoria de las víctimas, fue en otro tiempo vínculo de unión de partidos con propuestas ideológicas antagónicas pero que tenían una base común, resultando incuestionable su estrategia de aislamiento institucional de aquellos que no condenaban el terrorismo (cuando no lo apoyaban abiertamente). Pero, lamentablemente y a la luz de lo ocurrido este 5 de enero de 2020, ese tiempo ya pasó.

El candidato a presidente del Gobierno ha decidido, pedir, negociar y aceptar el voto de los filo-etarras. Igual que ya hiciera en Navarra. Y yo me pregunto, ¿qué ocurre con los defensores de nuestro orden constitucional que se dejaron la vida en ello? Son muchos los nombres que me vienen a la cabeza y, sinceramente, la rabia y la impotencia me inundan. El Sr. Sánchez no tiene derecho a pretender que obviemos a tantos héroes que fueron asesinados vilmente y que, gracias a su valor, podemos vivir hoy en libertad sin tener que mirar debajo del coche cada mañana. El hijo del socialista Fernando Múgica, asesinado por la banda terrorista, ha dicho que la actuación de Sánchez “produce una náusea infinita”. No se podría describir mejor. Y lo peor de todo es que muchos socialistas, que me consta se encuentran estupefactos, estén callados. Por tanto, apelo a los votantes, militantes y cargos públicos socialistas para que reaccionen ante semejante indignidad.

En política vale casi todo con tal de lograr el poder. Pero ese “casi” encuentra su razón de ser en unos mínimos básicos y fundamentales, como es la defensa de la libertad, de la convivencia y, por tanto, el enfrentamiento democrático contra los defensores de los terroristas. Y el hecho de que el futuro Gobierno se apoye precisamente en éstos, es una ignominia ante la que no podemos permanecer impasibles.