Descoordinación general
LUNES: CADA LOCO CON SU TEMA. En un territorio limitado, como es nuestra isla, no deberían producirse faltas de coordinación o, incluso peor, una descoordinación entre las distintas administraciones que nos gobiernan. Antes, al contrario, problemas que afectan por igual a todas ellas deberían ser abordados y resueltos por la administración superior adoptando soluciones comunes. Pero sucede lo contrario, ante problemas comunes unas administraciones taifas adoptan en ocasiones soluciones diferentes e incluso contradictorias y muchos problemas continúan sin resolverse.
Un ejemplo paradigmático es el caos circulatorio de Palma, donde Ayuntamiento, Consell y Govern adoptan cada uno por su parte soluciones distintas y al final no sólo no resuelven el gran problema que afecta a la ciudad, sino que incluso lo agravan. Ahora, en referencia a las excursiones de vehículos a motor por caminos rurales o zonas naturales, reclamando, al igual que hacen los ayuntamientos, una normativa supramunicipal que les conceda seguridad jurídica, el presidente del GOB; Amadeu Corbera, ha dado en el clavo. Govern y Consell deberían prohibir esta actividad. Lo que deberían hacer Govern y Consell es coordinarse y solucionar conjuntamente problemas que afectan a todo el territorio, pero… así son las cosas: cada loco con su tema.
MARTES: SEGURIDAD INSEGURA. Dicen, datos fiables, que Baleares lidera la tasa de criminalidad en toda España. Un récord. Pero nuestra presidenta, Francina Armengol, ha garantizado hoy que las Islas son «muy seguras». Es más, a pesar de encabezar la tasa de criminalidad, con una media de 64 delitos por cada 1.000 habitantes, el Ministerio del Interior no contempla la existencia de una gran población flotante aunque en el caso de Palma sea superior en casi veinte puntos a la media de las Islas: 83 casos por cada 1.000 habitantes. Un desastre esplendoroso. Pese a ello, por ejemplo, faltan 512 plazas de la Guardia Civil y más de 300 de Policía Nacional, amén de vacantes en la Local. Y esto se debe, mayoritariamente, a que quienes son destinados aquí, debido a los elevados precios de la vivienda, no quieren cubrir estas plazas. Está claro, la falta de vivienda, olvidada por las actuales administraciones, impone ahora, entre otros problemas, estas consecuencias indeseables que afectan a un asunto clave como es la falta de seguridad.
MIÉRCOLES: UN FUTURO SIN VIVIENDAS. Una asociación, ABINI (Asociación Balear Inmobiliaria Nacional e Internacional), asegura que con las actuales administraciones harían falta 85 años para generar 14.000 viviendas sociales que ahora mismo hacen falta en Mallorca. Han cuestionado que se puedan construir 14.000 viviendas de protección oficial (VPO) a la velocidad necesaria para solventar la falta estructural. ¿Pesimismo radical? Quizás no tanto, si bien, aunque ahora todas las administraciones se culpen entre ellas de la falta de vivienda y prometan soluciones, aunque no sean conscientes de esta falta, quizás alcancen a convencerse de que esta es, en efecto, la pura realidad.
JUEVES: UN DOBLE DISPARATE. Primero, montar un tramo de tren-tram en el interior de Manacor por lo que será necesario efectuar un trasbordo a la llegada a la estación para enlazar con el tren hacia Palma. Y segundo, financiar todo este despropósito -120 millones- o sea, un futuro ferrocarril, hasta Cala Rajada y Cala Millor con el impuesto de la ecotasa. ¿Caben mayores absurdos? Pues no hay que descartarlo. A menos que cambien las administraciones, este será el futuro, o sea un disparate total.
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