Madrid
'Vox'

Fúster responde a Monasterio: «No comparto sus valoraciones, las cosas son más sencillas»

"Vox está por encima de cualquier persona", ha dicho Fúster

Isabel Pérez Moñino-Aranda será la nueva portavoz de Vox

  • Ana Borges
  • Periodista política cubriendo la información de la Comunidad de Madrid. Antes trabajé en esRadio cubriendo información política.

El nuevo presidente de Vox en Madrid, José Antonio Fúster, ha lamentado la decisión de Rocío Monasterio de entregar su acta de diputada y abandonar la política y ha reconocido que ha sido «una sorpresa» para el partido, que no esperaba esta decisión y que le hubiera gustado que siguiera como portavoz de la formación en Madrid.

Fúster también ha lamentado la interpretación que ha hecho Monasterio sobre por qué ha sido destituida como presidenta de Vox en la Comunidad de Madrid. «Yo les digo que las cosas de los partidos son mucho más sencillas, y la vida de los partidos tienen otros ritmos, las interpretaciones que ha hecho Rocío no puedo compartirlas».

Pero añade, «esto no quita para que diga desde aquí mi agradecimiento máximo por todo lo que ha hecho durante estos años y desearle la mejor de las suertes». «Me sorprende su decisión y me da pena porque hizo una labor excelente. Pensábamos y queríamos que siguiera como líder y portavoz del grupo en la asamblea madrileña».

Fúster también ha anunciado quién será la nueva portavoz de Vox en la cámara regional, ésta será la diputada Isabel Pérez Moñino-Aranda.

La nueva portavoz ha trabajado durante muchos años como abogada por cuenta ajena, en la Asesoría Jurídica de Race, y por cuenta propia. Estudió Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid y ha desarrollado toda su vida profesional en puestos de responsabilidad dentro del ámbito jurídico. Ha participado activamente en VOX desde su afiliación en 2018, siendo coordinadora de la Zona Electoral de Madrid Sur y siendo concejal de VOX en el municipio de Fuenlabrada.

A día de hoy, forma parte del Grupo Municipal de VOX en el Ayuntamiento de Fuenlabrada. Es diputada en la Asamblea de Madrid desde el pasado 28 de mayo de 2023 y desde ahora ocupará el puesto de nueva portavoz en dicha institución.

Por último, el nuevo presidente de Vox en Madrid, José Antonio Fúster, ha señalado que el partido seguirá trabajando porque «Vox está por encima de cualquier persona» y se ha mostrado convencido de que se volverán a encontrar con Rocío Monasterio «en el camino».

Críticas a Vox

La decisión de Monasterio de dejar la política llega después de que este miércoles Vox decidiera renovar la presidencia del partido en Madrid, que hasta ahora ocupaba Monasterio, y colocar al frente de la formación a José Antonio Fúster, portavoz nacional de Vox y también diputado de la Asamblea de Madrid. «Hoy no soy persona de confianza del secretario general y del presidente», ha lamentado Monasterio tras a anunciar que deja la política.

Monasterio ha aprovechado su discurso de despedida en la sala de prensa de la cámara madrileña para criticar a la dirección del que hasta ahora era su partido. «Vox Madrid era el único comité ejecutivo provincial que quedaba en España votado y elegido por todos sus afiliados, o sea, habían votado todos los afiliados. Y que, por cierto, estos afiliados componen el grupo más numeroso de todo Vox», ha trasladado. La ex líder de Vox en Madrid ha lanzado así un dardo al presidente del partido, Santiago Abascal, y al secretario general, Ignacio Garriga.

La ya ex diputada autonómica ha reconocido que los dos máximos dirigentes del partido tienen «potestad de nombrar a dedo al siguiente Comité Ejecutivo nacional de Vox Madrid». Esta renovación está fechada para el próximo mes de noviembre, gracias a «las sucesivas enmiendas que se han ido presentando a los estatutos».

La arquitecta de profesión ha criticado el rumbo de la formación. A ojos de Monasterio, la reforma de las normas internas de Vox «suponía dejar en el olvido esa democracia interna que se había venido a defender». «Me parece lógico y me parece honesto también dejar mi acta de diputada», ha explicado.

Monasterio volverá ahora a su trabajo, la arquitectura. Para ella, la política era «un acto de servicio a España y a los españoles». «Lo he afrontado con un sacrificio de mi comodidad personal, de horas con mis niños, de tiempo con mi familia, de renuncia a mi trabajo, para intentar aportar algo a la sociedad y no como un puestecito del que vivir eternamente», ha manifestado.