Juegos Olímpicos
El tenista reflexionó tras caer ante Djokovic en los Juegos Olímpicos

El entrenamiento ‘invisible’ que mantiene a Rafa Nadal alejado de la retirada

Rafa Nadal no encuentra su mejor versión en su regreso al tenis, pero sigue sin decidir sobre su retirada o continuidad

Los entrenamientos de Nadal son mucho mejores que los partidos y ahí puede estar una de las claves

Rafa Nadal tras perder ante Djokovic: «No puedo pensar que cada día es el último»

  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

Los Juegos Olímpicos de París 2024 se presentaban como un sueño para Rafa Nadal, tanto en competición de dobles, formando pareja con Carlos Alcaraz, como individuales, cuadro que desde el día del sorteo se puso cuesta arriba, dibujando un posible golpe que Nadal, siempre ejemplar y valeroso, no quiso eludir y Novak Djokovic se encargaría de asestar sin piedad. Una vez eliminado de manera contundente del singles, Rafa comparecería ante los medios demostrando su hartazgo por la pregunta sobre la retirada. Entre todas sus explicaciones, una que se repite y que le mantiene, al menos por el momento, alejado de la decisión definitiva del adiós.

Nadal no está compitiendo al nivel que desearían sus fans, tampoco al que a el le gustaría ni espera. Conociendo al balear, extremadamente realista con sus posibilidades, la frustración de no dar la vuelta al partido ante «el mejor de la historia», como él mismo describió a Djokovic, o por no ganar una semana antes el torneo de Bastad, resulta llamativo. La inactividad debería apartarle de estos privilegios competitivos, más allá de su grandeza, Pero Rafa Nadal se ve entrenar cada día y se nota preparado, lo demuestra aunque en los partidos oficiales las sensaciones no estén diciendo lo mismo. En lo oculto, lo invisible, el campeón español sí rinde al 100% de su elevada exigencia.

«Si siento que no soy competitivo y no tengo la capacidad de ser competitivo, voy a tomar la decisión de irme, pero he jugado poquito», deslizaba Nadal en una zona mixta de Roland Garros repleta, como cada día, de periodistas esperando a las impresiones del rey de la tierra batida, que ya –o por el momento– no ejerce como tal. Todo ello después de protestar y demostrar el agotamiento por las cuestiones constantes al hilo de su retirada. ¿Sabéis lo que pasa?, que vengo aquí y me preguntáis cada día lo mismo y al final es muy difícil recuperar un nivel óptimo si estoy cada día pensando si me retiro o si no me retiro», espetó.

La decisión, como ya había avisado Nadal, se tomará después de los Juegos Olímpicos, en los que todavía está vivo, muy vivo, en competición de dobles con Carlos Alcaraz. Sin embargo, hay algo que invita a pensar en los motivos que alejan a Rafa aún de la retirada, más allá de haber competido «poquito» tras dos años durísimos de enfrentamiento con las lesiones. Los entrenamientos son buenos, llevan siéndolo desde Roma y en esa dinámica se ha seguido en Roland Garros y en el periodo hasta Bastad y los Juegos.

Lo mejor de Nadal, en los entrenamientos

Antes de acudir con el resto de periodistas, Nadal charló con Álex Corretja, enviado de Eurosport y ex tenista con el que se ha acostumbrado a dejar análisis brillantes sobre lo acontecido en cada partido que juega. En la reflexión de la derrota ante Djokovic, además de la autocrítica, volvió a resonar la frustración por no poder completar una de las máximas del deporte de élite, aquello de ‘se juega como se entrena’.