Investigación
Bandas latinas

Los castigos ordenados por el líder de los Latin Kings: «Ese no se va a poder levantar de la cama»

El servicio de Información de la Guardia Civil investigó entre junio de 2022 y febrero de 2023  las actividades de Eric Javier Velastegui Jara, conocido como King Wolverine y líder de la banda de los Latin Kings en España, encarcelado desde 2003 en la prisión coruñesa de Teixeiro por una violación, con los miembros del grupo que estaban en libertad, como Tatam, su lugarteniente, encargado de imponer el orden y la ley de los Latin Kings en España, algo que hacía con mano dura siempre, desde palizas de un minuto de duración a quien cometiera una infracción hasta órdenes como «ese no se va a poder levantar de la cama» en alusión a un castigo impuesto por Tatam a un miembro de la banda por faltar a una reunión.

José A.V.R., alias Tatam, recibía órdenes directas de King Wolverine desde la cárcel de La Coruña e incluso es reunió con él durante un permiso de fin de semana. Durante los años que Wolverine ha estado en la cárcel era Tatam quien impartía órdenes y justicia entre los suyos.  La confianza en su segundo era tal que Tatam se permitía impartir castigos de manera discrecional. Desde palizas de un minuto dadas por los mandos de la banda que el miembro castigado tenía que aguantar estoicamente sin revolverse hasta la amenaza de palizas dadas por cuatro kings, los miembros de mayor graduación de la banda, por faltar a una reunión.

Mientras tanto, varios miembros acudieron al Consejo Corona de Chicago (Tierra Madre de los Latin Kings) y consiguieron que expulsaran a Wolverine y los suyos por infringir la norma de estar condenado por una violación sexual y no reportar asiduamente a la organización internacional de Estados Unidos. De esta manera, lo que hasta el momento tenía el visto bueno de los Latins de Chicago se convirtieron en los torcidos, que iniciaron una contraofensiva para intentar recuperar su posición en España.

Desde la cárcel Wolverine seguía dando órdenes a su segundo al mando, Tatam, para intentar reorganizar la banda y negociar con el Consejo de Corona de Chicago, que los había expulsado. La Guardia Civil comenzó a investigar la reorganización de Latin Kings y pinchar sus teléfonos en junio de 2022 después de que se recibiese el aviso del director de un instituto en una localidad del norte madrileño que denunció el intento de captación de menores para la banda. La sorpresa llegó cuando descubrieron que entre estos «captadores» estaban viejos miembros de una banda que se suponía desactivada e ilegalizada desde 2012 por sentencia judicial.

Los primeros indicios de estos castigos físicos fueron la declaración de un testigo protegido a la Guardia Civil el 2 de septiembre de 2022 que explicó que «en las conocidas como deportivas (reuniones orgánicas de la banda) en las que el propio TP 2022/04 ha visto como la parte directiva del Capítulo (organización territorial) ordenaba agredir físicamente a otros miembros al objeto de dar cumplimiento a la normativa interna de la banda, a modo de castigo físico, llegando a detallar que consistía en pegar al castigado durante 1 minuto en el que tenía que permanecer inmóvil». Otro testigo protegido declaró en el mismo sentido.

El 22 de diciembre de 2022 los agentes de la Guardia Civil que investigaron al grupo grabaron una conversación telefónica entre Luna (pareja de Wolverine) y Tata, acerca del posible castigo físico infligido a King Guille, en el transcurso de una reunión en casa de otro miembro, en este caso Yahir. El delito de King Guille que además le costó la expulsión del grupo fue acusar a Tatam de quedarse con dinero, «hecho que motivó que Tatam ordenara a un tercer miembro de la banda presente en esa reunión agrediese a King Guille», escribieron los agentes de la Guardia Civil en el informe que hicieron llegar al Juzgado de Collado Villalba que investiga a la banda en Madrid.

Otra conversación intervenida por el Servicio de Información de la Guardia Civil, los tombos en el argot de los Latins, el 25 de diciembre de 2022 entre King Tercero y Tatam se hace referencia a que si Coscu no acude a la reunión prevista ese día «será castigado con agresión física por cuatro miembros del Capítulo de Galapagar (‘son cuatro bro, el cuerpo entero, ese man no se va a levantar de la cama’), a lo que Tatam muestra su conformidad (cuando soy recto, soy recto)».