Internacional

Un juez suspende el nombramiento de Lula como ministro para evitar su blindaje judicial

Un juez federal en Brasilia ha suspendido este jueves la toma de posesión como ministro de Estado del ex presidente brasileño Lula da Silva, en una decisión preliminar que será apelada por los abogados del Estado.

«Interrumpo el acto de nominación del señor Luiz Inacio Lula da Silva para el cargo de ministro de Estado jefe de la Casa Civil o cualquier otro que le otorgue prerrogativa de fuero», señaló la decisión del juez Itagiba Catta Preta, que aún debe ser revisada por instancias judiciales superiores.

La iniciativa del magistrado pretende evitar que el ex presidente y ex líder del Partido de los Trabajadores se blinde ante las causas judiciales que lo acosan. Lula fue arrestado brevemente el pasado 4 de marzo para interrogarlo sobre la propiedad de un tríplex ubicado en el Edificio Solaris, un condominio de lujo ubicado de Sao Paulo construido por el grupo de ingeniería OAS, involucrado en el escándalo de corrupción de Petrobras.

Los investigadores creen que Lula es el verdadero dueño del apartamento y que lo habría recibido como pago por ejercer su influencia en la adjudicación de los contratos públicos de Petrobras, de acuerdo con la prensa local.

Petición de prisión preventiva

Durante su declaración ante la Fiscalía la semana pasada, acusado de blanqueo y corrupción por un tríplex de lujo que le habría regalado una constructora implicada en el caso Petrobras, el ex presidente Lula da Silva aseguró: “me quieren jubilar porque estoy viejito, pero seré candidato en 2018 y tendrán que aguantarme los que me atacan”.

De hecho, la semana pasada, la Fiscalía del estado de Sao Paulo ha instado a la detención del ex presidente de Brasil. En la denuncia hecha pública el jueves, los fiscales Cássio Conserino, José Carlos Blat y Fernando Araújo decretan “necesaria la prisión preventiva, por conveniencia del proceso penal” ya que entienden que el ex presidente podría “movilizar a su violenta ‘red de apoyo’ para evitar que el proceso criminal iniciado siga su curso natural”.

Así, para dar esquinazo a todos estos frentes judiciales, Lula aceptó a principios de esta semana integrarse en el Gobierno de sus sucesora, Dilma Rousseff, lo que le dotaría de un fuero.

Este miércoles, un juez hizo pública una grabación de una llamada de la presidenta a Lula en la que le decía que le enviaba «su nombramiento» para que lo pudiera «utilizar cuando sea oportuno», en un claro indicio de que su integración en el Ejecutivo sólo buscaba un parapeto ante las causas judiciales por corrupción que están acabando con su imagen y, quizás en un futuro cercano, con sus huesos en la cárcel.