Internacional
AUTOR DE 'LOS TRAES JAQUES DEL REY DE MARRUECOS'

Javier Otazu: «Marruecos y Argelia se están armando militarmente porque están en una guerra fría»

Javier Otazu, actualmente delegado de la Agencia EFE en Nueva York, ha vivido en Marruecos 16 años en dos diferentes etapas, durante el reinado de Hasán II y más tarde en el de su hijo Mohamed VI. En esta entrevista con OKDIARIO, Otazu, autor de ‘Los tres jaques del rey de Marruecos’ (Catarata) hace una radiografía de la «guerra fría» que existe actualmente entre Marruecos y Argelia y de cómo esta puede afectar a España: «Marruecos tiene un grifo con la inmigración y España tiene las manos atadas».

Otazu ha residido en Madrid, El Cairo y Lima, y ha recorrido una gran parte del mundo árabe y de otros países musulmanes como Irán, Pakistán y Afganistán. Su conocimiento del islam y de la lengua árabe le ha permitido comprender en profundidad al país magrebí, en cuyo primer libro llamó “el extraño vecino”, por ser un país todavía muy desconocido para los españoles. El año 2021, especialmente turbulento en las relaciones hispanomarroquíes, es el objeto de estudio en esta su segunda obra sobre el Marruecos contemporáneo, la obra que no pudo escribir ni publicar mientras vivió allí.

El reinado de Mohamed VI se caracteriza esta última década por una constante erosión de las libertades, en una deriva autoritaria en que las decisiones del monarca no se discuten ni en el Parlamento ni en los partidos ni en la prensa.  Ahora que las relaciones entre España y su vecino del sur han vivido uno de sus peores momentos tras la llegada masiva de inmigrantes a Ceuta, Otazu describe la realidad de la corte marroquí, las intrincadas maniobras geopolíticas y diplomáticas, los episodios de espionaje y, en general, las arbitrariedades de un régimen que desconciertan en el panorama internacional mientras no sufre el menor cuestionamiento a nivel interno.

Y desvela cómo las tres bazas con las que juega Marruecos desde hace cincuenta años en sus relaciones con España —el Sáhara, la inmigración y las ciudades de Ceuta y Melilla— han confluido en los recientes acontecimientos hasta formar la tormenta perfecta.