Internacional

Día Mundial del Retrete: más de 4.000 millones de personas carecen de un saneamiento seguro

El Día Mundial del Retrete recuerda que unas 4.200 millones de personas no tienen las instalaciones necesarias y seguras de saneamiento para protegerse de enfermedades teóricamente prevenibles y que atacan directamente la dignidad de estas personas.

Aquafed es la federación empresarial que colabora con ONU Agua para intentar cumplir las metas establecidas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Su director ejecutivo, Neil Dhot, defiende que «me parece bien que a la gente le parezca divertido el nombre del día si con ello sirve para llamar la atención de la comunidad internacional».

Pero, ¿qué se entiende por saneamiento seguro? Es tener una instalación higiénica independiente de otros hogares y que, o bien permite el almacenamiento de los excrementos ‘in situ’, o bien posibilita su traslado a centros externos de tratamiento.

Cada año se producen 432.000 muertes por enfermedades diarreicas por la falta de estos servicios, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, 297.000 niños menores de cinco años fallecen cada año por un saneamiento insuficiente, consumo de agua insalubre o mala higiene de manos.

Por raro que nos parezca, 673 millones de personas de todo el mundo siguen defecando al aire libre y 2.000 millones se abastecen de fuentes de agua potable contaminadas por heces. Además, unos 1.500 millones están infectadas por parásitos transmitidos por el suelo.

Neil Dhot advierte de que «en algunas partes del mundo, damos por sentado el hecho de darnos un baño o lavarnos las manos en el lavabo, pero para la mitad de la población mundial es un lujo que podrían no tener nunca». «Es frustrante que siga habiendo gente que no se dé cuenta de que la falta de saneamiento cuesta vidas», zanja.

Los niños son uno de los colectivos más vulnerables y, en situaciones de conflicto, más aún. «Según WaterAid, tres niños mueren cada cinco minutos en algún lugar del mundo por infecciones causadas por la falta de agua salubre o un ambiente insano. Seguro que este dato por sí solo basta para que haya personas que se den cuenta de la importancia de lo que decimos durante el Día Mundial del Retrete», asegura.