¿Cómo se hace?
Pintura

Cómo pintar con pistola de forma adecuada

Pintar con pistola nos ayudará a ganar tiempo y obtener mejores resultados en grandes superficies. Toma nota de esta técnica y ponte manos a la obra.

Pintar con pistola es una tarea que nos ayudará a personalizar muebles y objetos de grandes dimensiones. Cuando necesitamos un acabado rápido y no disponemos de tiempo, la pistola es la mejor de las opciones posibles. Saber utilizarla es una cuestión de técnica y un cierto esfuerzo por conocer el funcionamiento de esta herramienta. Cambia por completo el color de una habitación, pinta un coche, esos muebles de la abuela o recicla, un universo de posibilidades se abrirá por completo ante ti frente a ti con el uso correcto de una pistola de pintura que hará tu vida mucho más sencilla.

Pasos para pintar con pistola

  1. Las pistolas de pintura funcionan a presión, tienen una capacidad y dimensiones distintas. Escogeremos la pistola que más se adapte a nuestras necesidades. Podemos consultar a los técnicos y pedir consejo en tiendas especializadas que nos ayuden a determinar cuál será la mejor opción para el uso que queremos darle.
  2. La presión de la pistola es la que marca la salida de la pintura. Con una mayor o menor concentración de pintura conseguiremos como también determinaremos el uso de una o más pasadas para que quede perfecto. Dependiendo de la presión deberemos tener en cuenta que usaremos una cantidad mayor o menor de pintura.
  3. La correcta ventilación del espacio y las protecciones necesarias son dos elementos a tener en cuenta antes de empezar a pintar. Es indispensable que esté todo correctamente ventilado y las partes más delicadas cubiertas. De esta manera conseguiremos ganar en precisión, eficacia y seguridad.
  4. Haremos algunas pruebas sobre una superficie lisa, un cartón o una caja de zapatos pueden ser buenos elementos para ir ganando práctica y comprobar que la pistola funciona correctamente. No pintaremos directamente para evitar cualquier error o mancha que afectará nuestro trabajo.
  5. Coger correctamente la pistola de pintura es un básico. La distancia sobre la superficie a pintar deberá ser la correcta. La mano debe estar firme y no debemos moverla en exceso, la seguridad a la hora de realizar la trazada deberá ser la misma que con el pincel para no dejar imperfecciones o superficies demasiado cubiertas que otras.
  6. A unos 30 centímetros de distancia del objeto que pintamos es lo que recomiendan los expertos. Movemos el brazo en primer lugar y después apretamos el gatillo. Solapamos cada pasada para evitar que queden sitios con menos pintura.

Con un poco de practica y atención vamos a conseguir disponer en todo momento de una pistola de pintura que convertirá nuestros proyectos en realidad. Toma nota de cada uno de estos pasos y empieza a renovar tu hogar.