España
Elecciones 10-N

Sánchez destroza la jornada de reflexión haciéndose ‘fotos de trabajo’ en Moncloa

La Junta Electoral Central ya ha expedientado al presidente del Gobierno en funciones por utilizar "medios institucionales que no están disponibles para los restantes candidatos" durante la reciente campaña.

Sánchez no cesa en el uso electoralista de La Moncloa. El socialista destroza la jornada de reflexión haciéndose ‘fotos de trabajo’ al frente de la Comisión de Seguimiento para Cataluña a la que ha reunido este sábado en palacio. En las imágenes difundidas puede verse, además, al líder de los socialistas flanqueado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la vicepresidenta Carmen Calvo.

El presidente del Gobierno en funciones recurre así a una más de sus maniobras de propaganda política desde Moncloa, saltándose la neutralidad exigida por la ley electoral para la jornada de reflexión, bajo el pretexto de monitorizar la evolución de los posibles altercados que pudieran provocar los CDR en Cataluña, en las próximas horas.

Miembros del Ejecutivo y del propio equipo asesor de Sánchez han justificado la necesidad celebrar dicha sesión de trabajo refiriéndose al riesgo de la situación en Cataluña, y han tratado de explicar la imagen presidencial del candidato socialista en La Moncloa -en vísperas de la repetición de elecciones generales este domingo- apelando a su sentido de la responsabilidad. 

Lo cierto es que la Ley Orgánica de Régimen Electoral (LOREG) obliga al descanso de los candidatos a los comicios, el día inmediatamente anterior a la votación, y prohíbe la difusión de propaganda electoral y la petición expresa del voto a los ciudadanos.

Poco parece importar a Sánchez este detalle, así como el hecho de que recientemente se ha convertido en el primer presidente del Gobierno de España al que la JEC abrió un expediente sancionador. Tal es así que continúa insistiendo en el uso electoralista de las instituciones públicas a su alcance y vinculando de manera subliminal sus imágenes de trabajo, al frente del Ejecutivo en funciones, a sus intereses partidistas, pese a los precedentes.

Reincidente

El pasado 31 de octubre, la JEC -máximo órgano en materia electoral- acordaba abrir sendos expedientes sancionadores a Sánchez y a su ministra portavoz, Isabel Celaá, por entender que con sus declaraciones habían violado el «principio de neutralidad» que la legislación española exige a los poderes públicos en periodo electoral.

La JEC censuró las declaraciones de tinte «electoralista» efectuadas por Sánchez -en su condición de candidato del PSOE a las generales de este domingo- a un medio de comunicación privado, durante una entrevista concedida desde un salón del palacio presidencial y tras haberse hecho eco de las mismas, a posteriori, colgando el contenido íntegro de la grabación en la web oficial de La Moncloa.

Dicho comportamiento fue, a juicio de la JEC, motivo más que suficiente para afear a Sánchez por vulnerar la prohibición recogida en el artículo 50.2 de la Ley Electoral.

Especialmente al tener en cuenta que, en un acuerdo de 17 de octubre, el propio órgano de vigilancia y control exigió a los miembros del Gobierno socialista en funciones que se abstuvieran de hacer manifestaciones electoralistas, desde sus posiciones institucionales, bajo amenaza de abrirles procedimiento sancionador.