Sánchez convoca a Casado, Rivera e Iglesias para «analizar la situación política» y excluye a Vox
El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, se reunirá en Moncloa la próxima semana por separado con los lideres del PP, Ciudadanos y Unidas Podemos para "analizar la situación política tras las elecciones del 28-A". El líder del PSOE ha decidido excluir a Vox del encuentro.
La primera reunión será con Pablo Casado el día 6 de mayo, a las 13:00 horas.
Al día siguiente, 7 de mayo, el presidente Sánchez recibirá a Albert Rivera a las 11:00 y a Pablo Iglesias a las 17:00.
Ninguno de los tres líderes políticos ha confirmado aún la cita.
En principio no se trata de una reunión para conformar un nuevo Gobierno y tan sólo se ha transmitido desde Moncloa que se trata de «analizar la situación política tras las elecciones del 28-A».
Además, tanto desde el PSOE como desde el propio Ejecutivo, con la vicepresidenta, Carmen Calvo, a la cabeza, se ha insistido que las negociaciones para una posible investidura no comenzarían hasta después de. 26-M.
Además, tanto Pablo Casado como Albert Rivera han manifestado tanto antes como después de las elecciones que no pactarán en ningún caso con el PSOE para hacer presidente a Sánchez.
En estos días han aumentado las presiones sobre el líder de Ciudadanos desde diferentes sectores para que, por activa o por pasiva, facilite un gobierno socialista que no tenga que apoyarse en independentistas y nacionalistas.
Carmen Calvo, en concreto, dijo el mismo lunes sobre la negativa de Ciudadanos a formar coalición con el PSOE que «Rivera dice no al respaldo de millones de personas».
Desde el PSOE, no obstante, también se apuesta por un gobierno en minoría «con apoyos puntuales», una solución difícil que no cuenta con el respaldo unánime del partido.
De hecho, el sector del PSOE crítico con Pedro Sánchez considera que la apuesta por gobernar en solitario tendrá una duración limitada, en torno a la mitad de la legislatura, y que, finalmente, Sánchez acabará ofreciendo un acuerdo a Ciudadanos. Un momento que coincidirá, pronostican, con un empeoramiento de la situación económica.
Por su parte, la ministra portavoz en funciones, Isabel Celaá, recordó este martes que la «vocación» del Ejecutivo es gobernar en solitario y apeló a la «geometría variable», es decir a pactos distintos con varias fuerzas políticas, para que salga adelante la investidura y haya una legislatura estable.
Vox ha sido excluido de las reuniones pese a contar con 24 escaños y ser la quinta fuerza política del Congreso, salvo que se trate de una primera ronda y el presidente del Gobierno decida celebrar más encuentros con los partidos presentes en el Hemiciclo.