El PSOE se pone la venda: rechaza una enmienda de Podemos que exigía vetar a Franco en la Almudena

El partido de Pedro Sánchez ha tenido esta semana una oportunidad de oro de elevar al Gobierno un mandato del Senado para que los restos de Franco no terminen en la cripta de La Almudena. Sin embargo, los socialistas no aceptaron en este sentido una enmienda concreta de Podemos a su moción de condena del franquismo.

Esta decisión del Grupo Socialista vino a expresar los problemas que tiene el Ejecutivo para asegurar que Franco no será enterrado en la parroquia de Santa María de La Almudena. De momento, Sánchez ha admitido que la exhumación no se realizará «antes de final» de año, como señaló su gabinete a finales de agosto, sino que se produciría en todo caso en 2019.

En concreto, la enmienda del grupo Parlamento de Unidos Podemos-En Comú-En Marea a la moción socialista instaba al Gobierno a «impulsar las medidas necesarias para que los restos de Francisco Franco no puedan ser enterrados en la catedral de La Almudena y en ningún otro lugar que pueda convertirse en un centro de peregrinación o exaltación del franquismo».

Fue precisamente la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, encargada de las gestiones del proceso de exhumación, quien manifestó el mes pasado que La Almudena «no es de titularidad privada», siendo responsabilidad de la Iglesia católica y del Estado, a través del Poder Ejecutivo, «garantizar en todo el territorio español que no se enaltece a Franco en ningún sitio ni en ningún punto del territorio», apostilló.

Sin embargo, el pasado miércoles, su compañero de partido y senador Antonio Rodríguez Esquerdo rechazó la enmienda formulada en dicha línea por Podemos al «no aportar mejoras» al texto de la moción. Los socialistas sí aceptaron, en cambio, otra enmienda de la formación de Pablo Iglesias pidiendo la nulidad de las sentencias dictadas por los tribunales de excepción durante el franquismo.

Comunismo

La moción de condena del franquismo presentada por los socialistas terminó saliendo adelante por la abstención del PP (también lo hizo Ciudadanos), que tiene la mayoría absoluta en la Cámara Alta. Los populares presentaron una enmienda de sustitución en la que además de expresar su «condena a la Dictadura franquista» y cualquier «exaltación» de la misma, también planteaban la «prohibición de cualquier fundación o asociación que exalte o glorifique el nazismo, el fascismo, el comunismo y todas aquellas ideologías populistas que fomentan el enfrentamiento entre ciudadanos».

Pero el Grupo Socialista, que rechazó así prohibir la fundaciones que hacen apología del Frente Popular, no aceptó esta enmienda de sustitución de los populares.